José Manzanero, representante de CSI-F en Liberbank, considera que la caída del Banco Popular no tiene por qué afectar a Liberbank que, “hoy por hoy es un banco solvente”.
Manzanero ha realizado estas declaraciones a Lanza tras la caída en la Bolsa del valor de la entidad financiera durante las últimas sesiones, de 1,10 hasta los 0,70 euros.
El representante sindical indicó que espera que pronto se recupere el banco de estas operaciones especulativas y consideró que es “una oportunidad estupenda” para invertir.
Respecto a esta caída en Bolsa, desde el diario Expansión afirman que los ‘hedge fund’ han puesto el objetivo en el único banco español cotizado que no forma parte del Ibex 35.
Añade el diario, a través de fuentes de una gestora nacional, que Liberbank es ahora un objetivo fácil para los grandes fondos especulativos. “Es el más pequeño de todos (vale en Bolsa alrededor de 650 millones de euros) y por lo tanto el más volátil en un momento de incertidumbre como el actual. Es el más sencillo de atacar para conseguir plusvalías rápidas”.
ERE
Por otro lado, preguntado sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que la dirección de Liberbank ha propuesto a los sindicatos, Manzanero indicó que este viernes se ha formado la mesa del período de consultas.
Consideró que es una noticia buena que empleados puedan acogerse a una baja voluntaria con buenas condiciones. En este sentido, añadió que la principal preocupación de los sindicatos es el empleo y están satisfechos con la garantía de la dirección de que no habrá traslados traumáticos, solo voluntarios.
El Expediente de Regulación de Empleo (ERE) propuesto incluye bajas incentivadas y voluntarias para un máximo de 525 personas, así como reducciones de jornada y movilidad geográfica a los afectados. El acuerdo tendría vigencia entre el próximo 1 de julio y el 31 de diciembre de 2019.
Las bajas voluntarias irían dirigidas, principalmente, a trabajadores nacidos en 1956, 1957 y 1958, es decir, a los que actualmente tienen 59, 60 y 61 años, aunque también podrán acogerse a las mismas el resto de trabajadores de Liberbank y Banco Castilla-La Mancha.
Además, la dirección de la empresa plantea reducciones de jornada de entre el 10,04% y el 13,56% y movilidad geográfica a los afectados en los mismos términos en los que se establecieron estas dos medidas en el ERE firmado en 2013.
En la nota, la dirección de la entidad considera que las medidas de contención y ajuste de gastos laborales son “necesarias para afrontar el impacto en el sector del mantenimiento y prolongación de las actuales condiciones de mercado y de las consecuencias en el negocio de la política monetaria vigente”.