Raúl Fernández
Queda una sola jornada por jugar en LEB Plata. Y a ella llegará el Alcázar Basket con opciones de entrar en el play off de ascenso a LEB Oro, algo que conseguirán los equipos que queden entre el segundo y el noveno puesto en la Liga Regular.
Lamentablemente el conjunto alcazareño no dependerá de sí mismo para alcanzar lo que sería un éxito en su primera temporada en esta categoría, la tercera del baloncesto nacional. La derrota en la prórroga cosechada el pasado domingo en casa ante el Zornotza impidió a los de David Varela tener este privilegio en el último encuentro, que se disputará, a la vez que todos los demás, el sábado a partir de las 20 horas.
Para esa jornada final las cuentas están claras en el seno de un Alcázar Basket que ahora ocupa la décima posición de la tabla. La primera premisa depende de sí mismo: ganar en la pista del Sammic. A priori, vencer en Guipúzcoa, en la casa del líder, se presume como algo complicado, pero el rival vasco selló este pasado domingo el primer puesto de la LEB Plata y el ascenso de categoría, luego en este choque ante los alcazareños no tendrá nada importante en juego, algo que puede ser mejor o peor, nunca se sabe.
Siempre y cuando el Alcázar Basket venza este encuentro (si no lo hace no tendrá opciones de play off), habrá que mirar a otra pista, a la del Morón, en donde se medirá el conjunto local ante el Basket Navarra. Y para entrar en la puja por el ascenso el Alcázar necesita un triunfo del Morón, ya que así igualaría a puntos con los navarros en la novena posición, pero con el basket-average particular favorable. Si estas dos cosas ocurren, Alcázar vivirá un play off.
