| BM BOLAÑOS
20 |
CASERÍO CIUDAD REAL
21 |
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| Mario Blanco, Diego (1), Emiliano Gonzalo (5), Juan Ángel Calzado, Donado (2), Alejandro Calzado, Miguel Ángel Prieto (1), José García (2), Loren (1), Toni (7), Fran González (1), Miguel Ángel Pérez, Pinilla, Francisco Ruiz, Alejandro Plaza y Naranjo. | Pablo García, Barroso (2), Jaime Cabanes (3), Gonzalo Almansa (1), Torre (3), Enrique Torres, Gallego (1), Mohíno (1), Sebas Restrepo (1), Javier Pérez, Álex Abad (6), Francisco Martín, David Abad (3), Imanol, Óscar Ruiz y J. A. Jiménez. |
| ÁRBITROS Vega Gemio y De la Torre Morales. Excluyeron dos minutos a los jugadores locales Donado (dos veces), Alejandro Calzado (dos veces), Miguel Ángel Prieto y Naranjo; y a los visitantes.. |
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| PARCIALES CADA 5 MINUTOS 2-2, 2-3, 4-5, 6-6, 8-8, 11-11, descanso, 13-13, 14-15, 15-18, 17-20, 18-20, 20-21 y final. |
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| INCIDENCIAS Pabellón Macarena Aguilar. Unos 250 espectadores. |
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El derbi provincial de Primera Nacional cayó del lado del Caserío por la mínima, en un encuentro en el que a los dos equipos les costó encontrar el camino del gol. Como deja muy claro el marcador, el encuentro fue muy igualado. Los dos equipos llegaban al derbi arrastrando una mala racha con la que querían cortar. Los de Santi Urdiales habían perdido sus tres últimos encuentros, dos de ellos por un solo tanto, mientras que los de Carlos Yuste sumaban dos derrotas. Al final, por un único tanto, fue el Caserío el que consiguió poner fin a su mala racha, prolongando la de los bolañegos.
Los locales comenzaron muy fuertes el encuentro. Antes de que se cumpliera el primer minuto ya ganaban 2-0. Pero fue un espejismo. El Caserío igualó la contienda y se apuntó un 0-4 de parcial. A partir de ese momento los goles fueron cayendo con cuentagotas. Se llegó al descanso con empate a once.
Tras la reanudación, se mantuvo la tónica. Las defensas eran claramente superiores a los ataques. Los dos equipos tenían que sudar para marcar y en el marcador se mantenía la igualdad (14-14 en el minuto 38). Álex Abad y Javi Torre encontraron entonces una veta de la que tiraron para que el Caserío diera un estirón. Tomó tres tantos de renta, poco en otros encuentros, mucho en este, en el que cada gol era un triunfo. Los visitantes supieron administrar su renta y acabaron por anotarse los dos puntos que estaban en juego, con lo que suman 18. Los bolañegos acumulan 10, a solo un punto de los puestos de descenso.
