Visita el pabellón Las Espartanas el líder del grupo D de la División de Honor Plata, el Adesal Córdoba, un equipo que solo se ha dejado cuatro pelos en la gatera (la derrota ante el Roquetas y los empates frente al Bolaños y el Universidad de Granada). Llega un líder con un innegable potencial ofensivo, pero al que le cuesta algo más defender, precisamente la principal virtud de las de Eusebio Angulo. El Soliss Pozuelo casi no se atreve a mirar la clasificación, no vaya a ser que se despierte. Las calatravas marchan en quinta posición y suman cuatro encuentros sin perder. Saben que este sábado, a partir de las 18:00, tiene por delante un obstáculo considerable si quieren prolongar esa racha, pero Las Espartanas no pierden nunca la fe. Hasta el punto de que fueron las mismas jugadoras las que pidieron al míster entrenar este día 8, festivo, porque sueñan con dar un golpe encima de la mesa que les haga replantearse sus límites.
“Queremos regalar a nuestra afición un buen partido. Las chicas se dejarán todo en la pista. Ganen o pierdan, la gente tiene que estar orgullosa de las Espartanas”, avisa Angulo, consciente de la dificultad de la tarea.
La buena noticia es que la enfermería está prácticamente vacía. De hecho, en ella solo permanece Paula Morales, aunque tampoco serán de la partida las juveniles María Pinto y María Rosell, ambas con la selección regional que juega contra Andalucía. Regresa, eso sí, Alba Jurado tras varios partidos en el dique seco por culpa de la rodilla. Por su parte, Jimena Laguna sigue con las molestias que le acompañan desde su convocatoria con la selección para jugar el Scandiberico, pero la primera línea pozoleña no quiere perderse un encuentro que podría ser, por qué no, un punto de inflexión para el equipo más joven de la categoría que está rindiendo esta temporada a un excelente nivel y que anda explorando hasta dónde puede llegar.