Si pudiera, el Quijote Arena comenzaría a sentir mariposas en el estómago. Desde este miércoles, la selección de Túnez entrena en la pista de la que fue catedral del balonmano nacional e internacional, que luce coqueta, con el azul de la superficie de las grandes ocasiones, con las porterías pintadas con el amarillo y rojo nacional. El sábado es la gran cita, el partido de las estrellas que enfrenta al campeón de Europa con el de África, o lo que es lo mismo, a ese Túnez que ya entrena, con la España que por fin se alzó con el título continental, la de Jordi Ribera, pero también la de Viran y los hermanos Dujshebaev, la de Cañellas y Julen. Los Hispanos llegan el jueves, después de cumplir con el penúltimo de los múltiples compromisos de la selección.
De momento, en Ciudad Real está Túnez, a la que entrena el catalán Toni Gerona. Y como no podía ser de otra manera, hasta el pabellón se desplazó la concejala de Deportes, Nohemí Gómez-Pimpollo, para dar la bienvenida a los norteafricanos. Y para anunciar que no el Quijote Arena se va a llenar. Más bien que se va a quedar gente fuera. De momento, no se abrirán las taquillas para la venta anticipada, porque se han vendido todas las entradas de esa modalidad por internet. El día del partido sí habrá venta, pero no serán muchas las que queden, solo las que obliga la ley, así que los interesados deben andar rápidos. “Queremos que Túnez se sienta como en su casa”, dijo Gómez-Pimpollo, “en un partido que a pesar de ser amistoso ha despertado una gran expectativa en la ciudad y en la provincia. Contamos con dos grandes selecciones”.
Un entrenador español
Hablar de balonmano en África es hablar de Túnez, Egipto y quizás Angola. Toni Gerona llegó en julio del año pasado a Túnez, después de entrenar un par de temporadas en Catar. El pasado de Gerona está en el FC Barcelona, con el que pasó “bastantes veces por el Quijote Arena, siempre en partidos duros y complicados. Este pabellón me trae muchos recuerdos”, explica el seleccionador tunecino, que llegó para rejuvenecer la selección y que, de manera inesperada, se llevó en Gabón el Campeonato de África al derrotar a Egipto. “En Ciudad Real se va a haber una selección joven, con muchos cambios con respecto a la que se suele ver en los Juegos Olímpicos y Mundiales. También va a haber cambios respecto a la que ganó el Campeonato de África. Tenemos varios lesionados, así que debutan siete jugadores, incluido un júnior. El objetivo es que se vea una selección ordenada, con un estilo propio, con el trabajo táctico que caracteriza a los entrenadores españoles sumado a la competitividad y carácter habitual de Túnez. Ante la que es la mejor selección del mundo a día de hoy, vamos a tratar de dar una buena imagen”. Entre los ausentes tunecinos, el jugador del FC Barcelona Jallouz. “Lleva toda la temporada tocado. El verano pasado tuvo una infección vírica y no está con la confianza necesaria para jugar con una selección como Túnez, un país en el que el balonmano se vive mucho”, explica Gerona, que defiende que “en la selección tienen que estar los que estén en un buen momento de forma y Jallouz no lo está. Venir no le ayudaría”. “Esta es una selección en formación, cuyo objetivo está en 2020, en el Campeonato de África que da paso a los Juegos Olímpicos”, concluye Gerona, que cree que para ganar a España “tendríamos que hacer un partido de cien y ellos uno muy flojo. España está por delante de nosotros individual y colectivamente, más rodado, más hecho. Para nosotros, jugar contra equipos de este nivel es una experiencia muy interesante para seguir creciendo”.
