Se acaba de cerrar un ciclo en la U.D. Socuéllamos, de hecho, ayer el club presentaba su nueva campaña de abonos. Después de tres años en Segunda B, oficialmente se abandona la categoría para volver a Tercera División. En este momento, el presidente azulón Jordi López, artífice de todos estos éxitos, valora lo vivido y afronta con ilusión el futuro inmediato de su equipo.
¿Cómo cierran su periplo en Segunda B?
Han sido tres años muy bonitos que ha vivido el pueblo, el club y este año ha sido complicado, ya desde agosto o septiembre no había buena sintonía en la parcela deportiva y eso nos ha llevado a descender.
Queda ese mal sabor del descenso, la estancia ha podido saber a poco, pero han sido tres años inolvidables que tampoco se pensaba que se podían vivir algo a un corto plazo…
Vamos a decir que han sido dos años espectaculares, con dos participaciones en Copa del Rey más un play off de ascenso a Segunda A contra el Sevilla, ha sido inmejorable y más para un club como el nuestro. Sí es verdad que quizá el fútbol ha sido demasiado generoso con nosotros en los primeros dos años y en esta última temporada hemos sufrido demasiado castigo, sobre todo por el trabajo que ha hecho la directiva y especialmente por el apoyo que hemos tenido de toda la afición de Socuéllamos, que es la mejor que hay.
Se han producido momentos históricos, para recordar siempre, se han visto en el palco del Paquito Giménez numerosas figuras del mundo del fútbol, en los banquillos, en el terreno de juego. Goleadas históricas, el primer partido del equipo fuera de la península, hechos noticiables a nivel internacional (parada de Carlos García y gol de Javi Gómez), usted ha compartido palco con un presidente de Primera División (Pepe Castro del Sevilla F.C. en los play off de ascenso a Segunda). ¿Con qué se queda de todo esto?
A lo mejor soy repetitivo pero me quedo con todo lo que ha disfrutado la gente de Socuéllamos y de alrededores, que gracias al fútbol hemos puesto en el mapa nuestro pueblo, y también me quedo con gente increíble que he conocido y que la llevaré de alguna manera en mi corazón.
En el lado opuesto, ¿el peor momento vivido?
Quizá la destitución de Ángel García Cosín, porque fue muy difícil tomar esa decisión. Y cuando se produce nuestro descenso de manera matemática a Tercera División.
¿Por qué no funciona el proyecto este año cuando incluso el equipo venía en línea ascendente en la categoría?
Si soy sincero creo que el grupo humano no ha estado acorde con el club ni con el pueblo. No puedo generalizar pero la calidad de los futbolistas ha sido muy inferior a la de los dos primeros años, de hecho se ha visto que no ha habido sintonía en el vestuario como en temporadas anteriores y eso es primordial. No quiero decir con esto que nadie sea culpable del descenso, el culpable soy yo como máximo responsable del club.
Desde su posición, que a lo largo de la temporada ha ido tanteando las distintas parcelas del club, ¿en algún momento pensó que esto no tenía marcha atrás, que no había solución y se terminaría bajando?
Cuando en la segunda vuelta de ocho partido ganamos dos o tres, vi que el equipo corría peligro de descenso, lo intentamos con la contratación de ‘Rojo’ de manera desesperada aunque sabíamos que con el calendario que tenía por medio que era jugar con los seis de arriba era tarea casi imposible, por eso creo que el descenso no ha estado ahí, ha estado en no haber ganado en el Paquito Giménez a equipos como el Mensajero, Navalcarnero y ‘Sanse’, con esas tres victorias el equipo se hubiese salvado.
¿Qué les motiva a cambiar de entrenador?
Fue buscar la última luz para ver si le cambiábamos el chip a los jugadores, por eso quiero agradecer enormemente el trabajo que ha hecho Ángel García Cosín al igual que el atrevimiento y la valentía que ha tenido ‘Rojo’ en agarrar el equipo donde nadie quería.
Después analizar esto y cerrar capítulo, tiene que haber ilusión a partir de aquí para afrontar los nuevos retos…
Evidentemente, este descenso nos ha ayudado mucho a aprender de los muchos errores que hemos cometido, yo principalmente, pero tengo fuerzas para hacer un equipo lo más competitivo posible para estar en la parte de arriba e intentar jugar los play off, que ya sería una meta importante. Tengo fuerza porque de todos los aficionados que me he encontrado todavía ninguno me ha dicho que no vaya a renovar su carné y para este proyecto tan ambicioso que tenemos la masa social es clave, es el mayor bien que tenemos y la gente pide con ilusión renovarlo.
Entonces, ¿habrá este año un objetivo predefinido antes de comenzar la temporada?
Jugar play off sí o sí, porque tenemos un ingrediente que muchos clubes no tienen, que es la masa social.
¿Se está trabajando ya en el nuevo proyecto?
Sí, sobre todo para empezar un proyecto deportivo prácticamente de cero donde queremos contar con un entrenador que nos dé esas garantías para afrontar el reto que tenemos.
De momento, ya hay campaña de socios…
Ya hemos comenzado con mucha ilusión y ahora toca volver a ponerse a trabajar.
¿Restituirán la figura de director deportivo tras la marcha de Vicente Aguado?
No tenemos claro si este año dispondremos de esa figura o será el propio entrenador el que haga la plantilla.
Parece evidente pero, ¿espera muchos cambios en la plantilla?
Me imagino que habrá muchos cambios porque la mayoría querrá seguir en Segunda B aunque el nivel deportivo que han dado algunos futbolistas no sea para la categoría.
¿Y en la estructura del club con la nueva categoría?
Dentro de los medios que tengamos vamos a tratar de tener la misma infraestructura de Segunda B.