El ciclista bolañego del Bicicletas Extremadura Jesús Alberto Ruiz salió este martes por la tarde a defender su versión de lo sucedido en mayo, cuando ocupó muchas páginas y minutos de radio y televisión, provinciales y nacionales. Entonces, en plena ola de accidentes de ciclistas, denunció que había sido atropellado por un camión que se había dado a la fuga y que le habían robado la bicicleta, valorada entre 10.000 y 11.000 euros. Ruiz estuvo en el hospital con una clavícula rota, además de dos costillas más una fisura en la cabeza del húmero y la pérdida parcial de carne en el codo, que tuvo que ser reconstruido.
Este martes, la subdelegación del Gobierno comunicaba, en una nota de prensa, que habían sido detenidos cinco individuos, entre ellos uno cuyas iniciales, así como su edad, correspondían con el ciclista. En ella, se calificaba el atropello como supuesto y se explicaba que se había localizado la bicicleta, que había sido puesta a disposición judicial. Como consecuencia, se habían producido las detenciones. “De igual modo, pudo determinarse en el transcurso de la investigación practicada que los hechos inicialmente denunciados por el entorno familiar del ciclista accidentado y posteriormente ratificados en su totalidad por él mismo, no se ajustaban a la realidad de como acontecieron los mismos, consumando con ello el delito de simulación de la omisión del deber de socorro denunciado”, decía la nota de prensa sobre la investigación del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT) del Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Ciudad Real.
Ya por la tarde, Ruiz emitió, por medio de su abogado, un comunicado en el que se ratificaba en la declaración de mayo y reconocía que “hace unas semanas” recibió una notificación para declarar ante la Guardia Civil, pero que lo hizo de manera “voluntaria” no como detenido. También asegura en la nota que no conoce “a las personas que supuestamente” robaron su bicicleta y que cuando conoció que estaba a disposición judicial solicitó su devolución.
Ruiz explica que el procedimiento sigue abierto en el Juzgado de Instrucción de Almagro y que no conoce “imputación formal por la comisión de infracción alguna”. Finalmente, lamenta que “la noticia facilitada por la Guardia Civil vulnera el principio de presunción de inocencia, dando como ciertos hechos que en ningún caso han resultado probados”, resaltando el daño al honor y a la reputación profesional de los hechos.
Sobre la mesa está, por lo tanto, la investigación de la Guardia Civil, en la que se apunta a un posible fraude, ya que, con la bicicleta recuperada no hay pruebas de un atropello y, por lo tanto, tampoco del delito de omisión de socorro. El ciclista defiende que no conoce a los supuestos autores del robo y que ni tan siquiera lo denunció, al tiempo que asegura que el procedimiento “está abierto” y teme las repercusiones que pueda tener para su carrera.