El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha ha anulado una condena por supuestos abusos sexuales de una niña de 5 años en Almadén, y absuelve al acusado, J.M.M.D., condenado por la Audiencia Provincial a doce años de cárcel.
El fallo del alto tribunal regional considera que la única prueba de cargo en el caso, el testimonio de un vecino, es imprecisa (no supo determinar qué día vio los hechos que denunció) y carece de la suficiente fuerza probatoria como para sostener una condena tan elevada.
“Estamos muy satisfechos, mi patrocinado siempre ha mantenido que es inocente”, ha explicado a Lanzadigital.com Miguel López, el abogado de J.M.M.D. (la fiscalía provincial todavía puede recurrir el caso ante el Tribunal Supremo).
J.M.M.D., de 35 años y compañero sentimental de la madre de la menor (ya no están juntos), fue condenado porque supuestamente un vecino lo vio obligando a la hija mejor de su pareja, de cinco años, a hacerle una felación en una parcela del paraje de Juan Gil de Almadén el año pasado.
J.A.Z.G., el testigo que supuestamente lo vio en esa actitud de forma casual, tuvo dudas antes de denunciar, pero tras consultarlo con un amigo policía decidió hacerlo.
“Esta sala no alberga duda alguna de que los hechos sucedieron según el testigo”, decía textualmente la sentencia de la Sección Primera de la Audiencia que acaba de anular el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha.
Pasó varios meses en prisión
J.M.M.D., con antecedentes penales por delitos violentos pero no sexuales, pasó varios meses en prisión preventiva por estos hechos.
La Audiencia Provincial le impuso además una orden de alejamiento de 150 metros de la niña, y la prohibición de comunicar con ella, durante veinte años. También fijó una indemnización por daños morales en 6.000 euros.
Ahora ha sido absuelto de todos los cargos.