La saga del conocido como “bombero torero” finaliza esta tarde en la Plaza de Toros de Almodóvar del Campo tras 89 años de espectáculos. Rafael Celis, explicaba que fue su abuelo el que comenzó este espectáculo taurino y que continuó su padre y después él pero que ahora queda ya en el fin de este personaje, aunque continúe el toreo cómico, “me llega la edad de jubilación”.
Tras 35 años en el toreo cómico y varios con esta figura del bombero torero reconoce que ha conocido muchos lugares y países, “tenemos nuestro público, hay mucha afición taurina, pero también a este otro toreo”.
Celis asegura que esta temporada ha sido corta porque han querido elegir, de manera muy cuidada, las plazas en las que actuar para que fueran “unos festejos escogidos como despedida”.
Este viernes se despide definitivamente en la Plaza de Toros de Almodóvar porque “hay confianza y quiero que salga bonita esta despedida”. Una despedida triste y sentida después de tres generaciones dedicadas a ser bombero torero. “Mis hijos han tomado otra decisión en su futuro y su profesión y yo los respeto”, puntualizó.
Acompañando al bombero torero siempre han estado presente los enanitos que ofrecen la parte más cómica y divertida a este toreo, éstos sí que siguen con sus espectáculos para divertir al público que cada tarde llenan las plaza de toros.