Alberto Jurado, médico de familia en Ballesteros de Calatrava, no tiene dudas: “Llevo más de treinta años en la medicina rural y los veranos son cada vez peores”. “El cambio climático se está notando muchísimo. Cuando empecé la gente salía a trabajar al sol y no pasaba nada, los veranos eran mucho más soportables, algo que no se puede decir en estos momentos”, asegura.
No ha asistido a ningún caso grave de golpe de calor, pero reconoce que en los últimos “ocho o diez años” hasta la consulta llegan problemás esporádicos y sobre todo complicaciones de salud derivadas de las molestias del calor extremo. “La gente me dice que no puede ni con su alma, que no descansa, no se relaja”.
35-36º con sequedad, horroroso para el cuerpo
¿Cuánto calor puede soporta el cuerpo humano sin enfermar?, “una temperatura ambiente de 35, 36 grados ya es horrorosa, además de la sequedad, lo que convierte en irrespirable salir a la calle”, dice.
Imprudencias, en los más jóvenes
Aunque trabaja sobre todo con población de mucha edad, este médico explica que las personas mayores tienen más sentido común que los jóvenes, que suelen eludir las recomendaciones relativas al deporte al aire libre. “A una persona mayor le dices fulanito no salga a tal hora a la calle porque hace mucho sol y usted toma una medicación tal y lo hace, la imprudencia se da más en los jóvenes”.
Aire acondicionado: a 25 o 26º
En cuanto al uso del aire acondicionado este facultativo opina que está bien, pero siempre y cuando se haga de forma adecuada. “Con temperaturas cercanas a los 40º en la calle no es recomendable que el aire acondicionado esté a menos de 25 o 26º. También se puede recurrir a aislar las estancias del sol con persianas para aminorar la temperatura dependiendo de la orientación”.
Mucha agua, alimentos frescos, ropa adecuada y protección solar
Jurado no considera exageradas las campañas y la difusión mediática de los problemas y consejos para el calor, que recomienda seguir a rajatabla a toda la población, en especial a la de riesgo: mayores, enfermos crónicos y niños.
“Lo primordial es aumentar la ingesta de agua, comer alimentos frescos como frutas, verduras y ensaladas, vestir con ropa adecuada de colores claros y protegerse del sol con sombrero o gorra”.
El médico también considera que hay que tomarse más en serio la protección solar para prevenir melanomas, “hay que utilizar un factor de protección solar en la crema adecuado al tipo de piel. En días de calor extremo todo el mundo debería salir a la calle con los brazos y la cara protegidos, aunque no se vaya a la playa o la piscina”.
Cuidado con el deporte
Los excesos deportivos suelen estar detrás de los golpes de calor. “En verano mi recomendación general sería que sólo se haga deporte aeróbico, andar o pasear, nada de hacer esfuerzos intensos con estas temperaturas”. Y si se practican deportes como el ciclismo, que requieren de mucho gasto energético, lo recomendable según Jurado, él mismo aficionado al ciclismo, es evitar las horas de sol, “la bici sólo habría que usarla a primera o última hora de la tarde, es decir no practicar estos deportes intensos entre las 9.00 y las 21.00 horas”.
Evitar las comidas copiosas y el alcohol es otra forma de prevenir los golpes de calor, además de no asistir a espectáculos en sitios cerrados sin ventilación con mucha gente. Y por último “frecuentar parques y zonas ajardinadas, es decir, buscar la sombra al salir a la calle como se ha dicho siempre”.
Trucos para dormir
El doctor Jurado no es partidario de recurrir a los tranquilizantes para tratar de dormir en estas noches tropicales ni al aire acondicionado. “Se que es difícil pero que hay que buscar un sitio con ventilación natural, no hacer alimentación copiosa por la noche e intentar meterse en la cama con algo relajante, una infusión puede ayudar”.
Por el momento el calor no está provocando colapsos en las consultas rurales, “tenemos más trabajo porque no se cubren las bajas y en muchos pueblos la población se duplica y triplica en el veraneo, se trata de pacientes con patologías previas a los que hay que hacer una continuidad asistencial”.