La Operación Especial de Navidad, entre el pasado 22 de diciembre y el 7 de enero, se ha cerrado en la provincia con 13 accidentes de tráfico, catorce heridos leves y dos graves.
El balance, según los datos facilitados por la Dirección General de Tráfico (DGT), ha supuesto un aumento de la siniestralidad respecto al mismo periodo de 2016-2017, con dos accidentes más, aunque ha sido la única provincia de Castilla-La Mancha que no ha registrado muertos en sus carreteras.
En concreto, se registraron trece siniestros (entre los de la primera, segunda y tercera fases), un 18% más respecto a los once de la temporada precedente.
En el caso de las personas que sufrieron lesiones, el número de los accidentados de carácter leve subió un 40%, de 10 a 14, y sólo hubo dos graves, uno menos (tres) que el año anterior.
De esta manera, a lo largo de toda la operación no ha habido que lamentar siniestros mortales en las carreteras ciudarrealeñas, aunque a nivel regional hayan fallecido cinco personas en otros tantos siniestros registrados en las provincias de Toledo (dos), Guadalajara, (uno), Cuenca (uno) y Albacete (uno).
Dicha cifra de accidentes mortales ha supuesto un aumento del 150% frente al año precedente (hubo dos), la misma diferencia que en personas fallecidas, así como en total ha habido 55 siniestros (un 14% menos), 68 heridos leves (un 18,07% menos) y siete graves (un 40% más9.
Desplazamientos
Respecto a los desplazamientos de vehículos, en la primera fase (entre el 22 y 25 de diciembre) circularon 163.000, en la segunda de ‘Año Nuevo’, entre el 29 de diciembre y el 1 de enero de 2018, la DGT contabilizó 135.000 coches por la red viaria provincial, mientras que para la de ‘Reyes’, la tercera, entre el 5 y el 6 de enero, hubo 96.000 desplazamientos.