El presidente de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG), José Martínez Jiménez, volvió a advertir de la difícil situación que vivirán el próximo año los regantes de la provincia, que no podrán regar sus cultivos ante los escasos niveles de agua embalsada en la parte oriental de la cuenca.
Fue una de las conclusiones del informe de la comisión de desembalse de la CHG, celebrada el pasado 20 de octubre, en la que sus miembros, encabezados por Martínez, estudiaron y debatieron las peticiones de la junta de explotación, y resolvieron entre sus acuerdos que no podrán atender las concesiones de riego ante la nueva campaña agrícola si no llegan nuevos aportes hídricos, ya que la media de agua embalsada en la parte alta de la cuenca no alcanza el 19%.
“Será un año duro, durísimo, pues prácticamente no podrán regar, teniendo en cuenta las actuales provisiones, y las necesidades mínimas para abastecimiento, caudal ecológico y cultivos permanentes, que son prioritarios”, sostuvo Martínez en declaraciones a lanzadigital.com.
Así, con la mirada puesta en las esperadas lluvias de otoño, la comisión de desembalse decidió “recoger toda la lluvia que caiga y que dé lugar a aportaciones a los pantanos”, así como en caso de necesidad autorizará los desembalses para garantizar el abastecimiento humano, como el último iniciado a finales de septiembre de 2,5 hectómetros cúbicos de agua desde la presa de Torre de Abraham al pantano de Gasset para avalar el consumo de agua a 120.000 vecinos, incluidos los de la capital.
Martínez recordó que los usuarios fueron informados del balance del año hidrológico en la junta de explotación que tuvo lugar el 10 de octubre, y que sirvió para que algunos de los responsables de comunidades de regantes propusieran poner en funcionamiento la tubería a la Llanura Manchega para el uso de regadío. “Tomamos nota de todas las aportaciones, aunque la situación es la que es”, insistió el presidente de la CHG.
Con todo, indicó que los 75 hectómetros cúbicos de volumen de agua que suman entre los siete pantanos de la cuenca del Guadiana en Ciudad Real es una cifra muy alegada de los volúmenes de la parte media y baja del río, con promedios del 70% en el territorio andaluz y de más del 50% en Extremadura.
Pacto Nacional del Agua
De otro lado, Martínez señaló que en las últimas semanas se ha seguido reuniendo con distintas comunidades de regantes de aguas superficiales de toda la cuenca para seguir avanzando en el Pacto Nacional del Agua “que queremos consensuar al máximo”.
El objetivo es redactar un documento “con muchas aportaciones para hacer un uso más eficaz y solidario de un recurso escaso”.
