La Policía Nacional reforzará con una unidad antidisturbios el dispotivo especial que ha preparado para este martes en la Audiencia Provincial de Ciudad Real, en la que tres hermanos de la familia gitana Cádiz compartirán banquillo como presuntos autores del asesinato de un rival, miembro de otra familia, los Flores, con la que llevan años enfrentados.
“Habrá seguridad especial tanto dentro como fuera del edificio”, han explicado a Lanzadigital.com fuentes policiales, en previsión de que se reaviven los enfrentamientos entre los Cádiz y los Flores, que en 2013 dejaron un herido grave y un año después un muerto: el vendedor ambulante Diego Flores, por cuyo crimen tienen que responder ahora los hermanos Ramón, José y Manuel Cádiz Cádiz.
Los juicios del año
La casualidad ha querido que los dos juicios más importantes del año coincidan la misma semana y los mismos días (del 6 al 8 de este mes) ante el alto tribunal provincial.
Bertol, también a juicio por intentar un crimen machista
Francisco Bertol, un vecino de Mguelturra acusado de intentar asesinar a su compañera sentimental en 2014, a la que le asestó ocho puñaladas, responderá en una sala contigua a la que se enjuicia “el crimen de los Cádiz” por varios delitos de violencia de género e intento de asesinato. De este caso se ocupa la sección segunda, el tribunal de la Audiencia Provincial especializado en violencia contra la mujer.
Del crimen de Diego Flores se ocupará la sección primera, que celebrará la vista en la sala del jurado, aunque no es un caso de tribunal popular.
Para los tres hermanos la fiscalía pide penas superiores a 30 años por los delitos de asesinato e intento de homicidio (a la mujer del tiroteado que lo vio todo) en concurso con conducción temeraria. A Ramón Cádiz, el que supuestamente apretó el gatillo y emparentado por matrimonio con los Flores, se le acusa además de tenencia ilícita de armas.