La Asociación de Familiares y Amigos de Personas Dependientes (AFAAD) celebró el Día Mundial del Ictus con una charla informativa sobre una de las enfermedades que más muertes e incapacidades provocan hoy en día: el ictus. El auditorio del Palacio Don Diego de La Solana se llenó a rebosar para escuchar al doctor Agustín Diego Chacón, internista solanero que trabaja en el hospital Gregorio Marañón de Madrid.
La presidenta de la asociación, Josefa Chacón, presentó al ponente, que estructuró su conferencia en varias partes. La primera, un acercamiento a la enfermedad y su tipología. “Todo el mundo ha oído hablar del ictus pero no sabe muy bien lo que es”.
También habló sobre el manejo del paciente dentro del hospital y el por qué de los protocolos médicos de actuación. Por último, explicó el papel de los cuidadores de un enfermo con ictus. “Es importante conocer los síntomas de dependencia y afrontarlo de la mejor manera posible para evitar el deterioro funcional del paciente”.
El doctor Chacón dejó claro que un ictus puede tener múltiples variantes, según la arteria donde se produzca y el nivel de gravedad del trombo. El gran problema es que los médicos difícilmente saben cómo va a evolucionar. “Es lo que peor llevan las familias porque no somos capaces de decirles mucho en las primeras horas o días”. También genera mucha angustia el cuidado posterior en el domicilio, en especial cuando el paciente es consciente de su dolencia.
Los síntomas que activan el “código ictus”
Es muy importante actuar en las primeras horas del accidente vascular y el galeno habló de tres síntomas globales: pérdida de movilidad de algún miembro, alteraciones en el habla y pérdidas de consciencia. “Si identificas cualquiera de los tres debes llamar al 112, donde se activará el ‘código ictus’, que es el que al final salva vidas”. He ahí la importancia vital de la actuación del familiar o acompañante. “Ellos nos van a decir qué ambulancia tiene que ir a casa y el hospital donde tiene que ser ingresado”.
En la charla se habló de cómo tratar la enfermedad, en el durante y en el después, pero también en el antes. La prevención, como en tantas dolencias, es crucial. Agustín Chacón admitió que hay cierta población que sufrirá ictus por predisposición genética, pero la mayoría puede evitarlo. “La mayor parte de la gente podría prevenirlo con cosas tan sencillas como controlar la tensión arterial”.
