A. R.
Ciudad Real
Numerosos ciudarrealeños acudieron ayer a presenciar la salida de la iglesia de San Pedro de Jesús Nazareno, en cuyo paso doscientas docenas de claveles rojos ‘sangre de toro’ conformaron el manto a los pies de la talla y un ramo de rosas rojas se colocó en la parte inferior de la cruz.
La salida de Jesús Nazareno fue recibida con emoción y alegría por los fieles y con la música de la Agrupación Nuestra Señora de los Reyes de Sevilla que tocó nada más traspasar la puerta del templo la marcha ‘Cerca de ti’ y el himno de España, además de estrenar la marcha ‘La Conversión de Sarah’, obra del compositor Miguel Ángel Font y que se basa en la tradición oral manchega de una leyenda del siglo XVI, muy vinculada a la imagen nazarena.
También se pudo presenciar la terminación de la túnica, a la que se han trasladado bordados de principios del siglo XX, de Jesús Nazareno, que lució unas nuevas potencias donadas por un hermano y en las que se recogen los emblemas JHS, la tiara de San Pedro y el escudo de las Hermanas de la Cruz.
Así mismo, se ha terminado el tallado del baguetón y parte del canasto correspondiente a los laterales del paso, llevado a costal por una cuadrilla de 50 costaleros.
Vestidos de oscuro y con velones morados, los hermanos y hermanas alumbraron el recorrido de Jesús Nazareno por la ciudad en una procesión que preludia la Semana Santa y a la que acudieron muchas personas de otras localidades de la provincia. El párroco de San Pedro, Pablo Martín del Burgo, presidió la procesión en la que un cuerpo de monaguillos se situó delante de los acólitos y en la que se vivieron emotivos momentos en el Camarín, el Pasaje de la Merced y en su regreso al templo de San Pedro.
