J. Y. / ciudad real
Las enfermedades del sistema circulatorio fueron la primera causa de las muertes producidas en Ciudad Real en el año 2008, ya que coparon casi el 31 por ciento de todos los fallecimientos registrados en la provincia en ese año.
Según los resultados definitivos de la estadística de defunciones sobre la causa de muerte del Instituto Nacional de Estadística (INE), la provincia tuvo 5.101 decesos, 2.580 hombres y 2.521 mujeres, un 30,9 % de ellos (1.581) provocados por enfermedades circulatorias como afecciones cardíacas, hipertensivas, infartos de miocardio o insuficiencia cardíaca, entre otras.
En segundo lugar se situaron los tumores como origen de otros 1.248 fallecimientos, con una tasa del 24,4 por ciento, mientras que las patologías respiratorias fueron las responsables de las defunciones de casi el 14 por ciento de las muertes de 2008, con 709 afectados.
En total, el año 2008 se produjeron 76 muertes más en la provincia que las registradas en 2007, cuando fenecieron 5.025 personas, lo que supuso una subida del 0,5%. Además, la tasa bruta provincial se situó en torno al millar de fallecidos por cada cien mil habitantes, por encima de la media nacional, situada en 847 personas.
Otras causas de muerte fueron las enfermedades del sistema digestivo (265), con un 5,1% de todos los fallecidos, las enfermedades endocrinas, metabólicas y nutricionales, con 222 muertes, y las patologías del sistema nervioso y de los órganos de los sentidos, que provocaron 194 fallecimientos.
Trastornos mentales
Además, 144 personas perdieron la vida por trastornos mentales y del comportamiento, el 64,5% de ellas mujeres; otras 141 sufrieron mortalmente enfermedades del aparato genitourinario, y 53 se vieron afectadas por patologías del sistema osteomuscular y del tejido conjuntivo.
El análisis del INE recoge además que en 2008 no hubo defunciones de mujeres por estar embarazadas, ni durante el parto o en el periodo de puerperio, aunque sí murieron un total de nueve niños por afecciones originadas en el periodo perinatal.
Por último, dejaron de existir 19 pequeños de la provincia, seis varones y 13 hembras, por sufrir malformaciones congénitas, deformidades o anomalías cromosómicas.
