Jarrones de lilas, bodegones con manzanas y paisajes naturales describen la evolución pictórica de una mujer “pionera”, “avanzada a su tiempo”, que consiguió un hueco para sus pinceles en una época en la que la pintura era cosa de hombres.
La familia de Matilde Fernández-Pacheco inauguró este jueves una exposición en la biblioteca municipal Lope de Vega con una veintena de obras de esta artista manzanareña que fue alumna del gran Antonio Iniesta y que se codeó con Juan Antonio Giraldo, dos referencias en la pintura.
Acompañado de un gran número de amigos y conocidos, que abarrotaron la sala de exposiciones, Diego Gallego, hijo de la pintora, explicó que la muestra salda la “deuda pendiente” que tenían con su madre, puesto que antes de morir preparaba una exposición.
Después de quince años desde el fallecimiento, la familia ha decidido que la mejor manera de homenajear a Matilde Fernández-Pacheco era con una “antología” que recorriera toda su obra, por eso la exposición incluye desde obras de sus inicios, como un retrato de su marido, a otras nunca expuestas de su última etapa pertenecientes a la familia.
La primera pintora que expuso en Manzanares
Sin estudios artísticos, más allá de las clases que recibió de Antonio Iniesta, en palabras de su hijo, Matilde Fernández-Pacheco desarrolló “una pintura alegre, donde resulta muy significativo el color, donde destaca la luminosidad y que refleja los temas de la zona”.
El paisaje manchego es dominante en las obras de esta artista, al igual que las flores, sobre todo, las lilas, que llegó a representar con gran perfección técnica. En los años 50 empezó de manera amateur con los pigmentos, pero desde 1975 al año 2000 llegó a realizar diez exposiciones individuales, en Manzanares, Ciudad Real y Madrid, aparte de otras colectivas.
Muy emocionado, Diego Gallego recordó que Matilde Fernández-Pacheco vivió unos tiempos en los que era difícil que la mujer desempeñara actividades al margen de las labores domésticas y probablemente fue la primera pintora que expuso en Manzanares.
Catálogos de exposiciones y poemas
Pero es que, además, la manzanareña exploró el verso, como reflejan los numerosos poemas publicados en la revista de creación literaria ‘Calicanto’ y el libro de poesía que llegó a publicar en el año 2000. Como ha reflejado el poeta manzanareño Federico Gallego Ripoll con motivo de la exposición, Matilde era una mujer de gran “sensibilidad” y “perseverancia”.
Notas de prensa, recortes de revistas y catálogos de exposiciones completan una agradable exposición, donde el retrato que hizo Antonio Iniesta a la autora en los años cincuenta permite capturar la esencia de este personaje que quedará en el recuerdo de Manzanares, como sus poemas “elegantes, llenos de color y sensaciones” para “suavizar” la dureza de La Mancha.
La exposición permanecerá hasta el 13 de enero en la sala de exposiciones de la biblioteca y la concejala de Cultura, Silvia Cebrián, destacó durante la inauguración que es un “orgullo” acoger las obras de esta mujer “avanzada a su tiempo” y que desarrolló un trabajo que “merece la pena contemplar”.