Los representantes de los grupos ecologistas locales y de la región han pedido hoy durante la celebración de la reunión del patronato del parque nacional de las Tablas de Daimiel que este órgano exija que se deje de regar en los Ojos del Guadiana, que son de dominio público.
Momentos antes Rafael U. Gosálvez y Jesús Muñoz han explicado a los medios de comunicación que ésta es una de las principales reivindicaciones que estos colectivos querían someter a votación en esta reunión.
Gosálvez ha tachado de “lamentable” que, después de que en abril de 2016 se procediera a la inmatriculación del deslinde de los Ojos del Guadiana a favor de la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) en el registro de la propiedad, una vez que se ratificó por sentencia del Tribunal Supremo en 1994 el deslinde realizado en los años 90, siga habiendo un pívot para riego en una zona pública.
Y ha recordado que, en la última reunión del patronato del Parque, el comisario de Aguas de la CHG, Timoteo Perea, aseguró que se había dejado regar y cosechar al propietario, dado lo avanzado del año, pero que una vez finalizada la campaña se deberá abandonar el paraje, algo que no se ha producido.
La insumisión de los “lobistas de la agricultura”
Gosálvez ha dicho que esta “insumisión de los lobistas de la agricultura, no de los agricultores”, sigue produciendo un daño al acuífero del que se sustenta el parque nacional.
Por otro lado, los grupos ecologistas han señalado que van a pedir al patronato que exija a la Junta de Comunidades ser informados de todos aquellos proyectos que pueden afectar a la calidad y la cantidad de agua que recibe el parque.
En este sentido, ha indicado que lo que pretenden es que se cumpla con la Ley de Parques Nacionales que obliga al patronato a emitir informes preceptivos de todos los proyectos que puedan afectar a su entorno natural, algo que tampoco está sucediendo en la actualidad.
Por otro lado, los ecologistas han propuesto que el Patronato se posicione sobre la actividad que lleva a cabo la alcoholera Alvinesa en el área de influencia del parque nacional.
En su opinión, la actividad de esta empresa no sólo puede estar detrás de los malos olores que se registran en Daimiel y que sufre toda la población, sino que además podría estar convirtiéndose en un foco de contaminación de las aguas subterráneas que posteriormente llegan al parque nacional.
En este sentido, van a instar al Patronato a que pida a la Junta que se cumpla la Declaración de Impacto Ambiental que emitió en su día y que obligue a la empresa a cumplir con la Autorización Ambiental Integrada que recibió.
En este punto han recordado que actualmente Alvinesa está vertiendo directamente a tierras que no se están cultivando las vinazas que producen a través de pívot, en un finca de 400 hectáreas.
Protección para los Ojuelos de Villarrubia
Por último, los conservacionistas han dicho que también va a pedir al Patronato que se pronuncie acerca de la necesidad de que el Gobierno de Castilla-La Mancha proteja el paraje de los Ojuelos, en Villarrubia de los Ojos, por sus valores ambientales
