La fiscalía de Ciudad Real ha pedido el sobreseimiento “por falta de pruebas” del caso de presunta violación en los carnavales de Miguelturra, que denunciaron dos jóvenes en marzo de este año.
“La fiscalía ha considerado que no había pruebas de que hubiera delito”, ha explicado hoy el fiscal jefe Luis Huete, en la presentación de la memoria de la fiscalía provincial relativa al año 2016.
En marzo de este año la Guardia Civil detuvo a cuatro jóvenes en Miguelturra, dos de ellos menores de edad, a los que dos chicas jóvenes denunciaron por agresión sexual.
El caso saltó a la luz días después de los hechos. Las chicas explicaron que se habían ido por propia voluntad al domicilio familiar de uno de los denunciados, tras una noche de fiesta, y que una vez allí les habían echado algo en la bebida y habían abusado de ellas.
Por estos hechos el juzgado de Instrucción número 7 de la capital abrió diligencias previas por dos presuntos delitos de violación, escuchó a los mayores de edad -los menores pasaron el juzgado de menores- y decidió dejarlos en libertad, aunque con la obligación de acudir al juzgado dos veces al mes.
La instrucción sigue adelante
Del caso se ocupa ahora el juzgado de instrucción número 5 (el 7 se inhibió en este juzgado que lleva la violencia de género), que sigue adelante con la instrucción, pese a esta postura de la fiscalía, acaban de confirmar fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha.
