Sin duda es una de las muestras más impactantes que se ha podido ver en la ciudad en estos últimos años y ha salido de la sabiduría y las manos de un joven artista que fue becado con las becas del Ayuntamiento de Puertollano In& Out, Gil Gijón.
Gil Gijón expone en la Casa de Baños 48 retratos que han sido realizados con el polvo de las casas en las que residieron estos puertollanenses. Es una muestra que quiere traer al presente lo que fue también el pasado más lúgubre de la Casa de Baños, cuando en este edificio emblemático de la ciudad también se utilizó como centro de interrogatorio en la época más dictatorial, en la dictadura franquista.
Elaborados con dos técnicas: la primera de retratos de polvo que, tras la búsqueda e investigación de las personas que tuvieron algo que ver con esta Casa de Baños, Gijón ha logrado averiguar dónde residía cada una de estas personas. Una vez conocido este dato, este joven artista ha visitado estos domicilios para poder tener una fotografía de lo más cercana a esta época y coger polvo de la casa de esa persona, “yo lo que hago es reproducir esa fotografía, con todos sus defectos y todo lo que esa fotografía guarda de memoria con el polvo de la casa de esa persona, en estos retratos sólo hay polvo, no hay nada de pigmentos”.
La segunda técnica es para las personas que no han podido contar estas historias de viva voz y ha contactado con sus familiares para poder conocer a esa persona y tener un retrato de ella, “aquí los retratos son transparentes, es una metáfora porque no te queda nada físico de la persona pero te queda el recuerdo, es transparente, en el cristal a simple vista no se ve nada pero al proporcionarle la luz del conocimiento te genera una sombra, la imagen de esta persona”.
La Casa de Baños es popularmente conocida como un centro de salud y bienestar, la gente iba a sanarse en esas aguas medicinales, pero la población no conoce que también fue un centro en el que se utilizaron todas las armas posibles para la represión y los interrogatorios. Es precisamente esta segunda etapa la que Gil Gijón ha logrado plasmar en esta exposición con retratos y cada uno de ellos con historias diferentes, algunas muy tristes y otras que el destino les trató mejor.