Izquierda Unida ha explicado, a través de su responsable regional de acción política, Chema Fernández, las razones por las que los concejales de IU rechazan que el Ayuntamiento de Puertollano entre en la segunda fase de Clime -tal y como ya se pronunciaron en la sesión plenaria ordinaria del pasado miércoles 27 de septiembre-.
Fernández esgrime que la principal razón radica en el pliego de condiciones que desde la FEMP se ha elaborado y en el que es a través de una empresa única, Creara, la forma en la que se realiza tanto la primera fase como la segunda -la realización de la auditoria como la implementación de las medidas necesarias para el ahorro energético-.
Desde IU se afirma que en dicho pliego la empresa contará con un beneficio del 8,5% “siempre estará ahí ese beneficio, se preadjudica las dos fases a esta empresa, una UTE, y los Ayuntamientos no pueden actuar dentro su propia casa”, al mismo tiempo se pregunta si la tecnología que se va a poner para ese ahorro energético es la mejor que existe en el mercado dado que no hay unos criterios mínimos establecidos.
En este mismo sentido se criticó que la pretendida economía de escala que se quería llevar a cabo con la participación de todos los municipios de la región se ha quedado reducida a tan sólo 47 localidades, por lo que ese objetivo no se ha conseguido. “Los Ayuntamientos están perdiendo autonomía porque no pueden contratar directamente, se restringen las capacidades de trabajo, son otros trabajadores los que realizarán ese trabajo provenientes de esa empresa, por lo que saldrá más caro, la falta de control municipal elevará los precios finales”.
Chema Fernández manifestaba, además, que la FEMP recibirá un millón de euros por este proyecto, “la FEMP no deja de ser una entidad privada”, concluyó.
No obstante, en la comarca es Cabezarrubias del Puerto una de las localidades que sí se han adherido a este proyecto Clime y precisamente está gobernado por un alcalde de IU.