Y es cierto, cuando nos referimos a la cantidad de problemas que nos estamos encontrando padres, educadores y profesionales que estamos cerca de nuestros hijos en general.
El asunto tiene que ver con el mal uso que hacen algunos de las nuevas tecnologías. No en vano ya hay estudios neurológicos que avisan de las graves consecuencias que en breve podremos apreciar en la psicología de nuestros hijos, el grado de adicción que van a llegar a aparecer claramente.
Lo estamos incluso ya comprobando, en consulta, en el ámbito escolar, en el fracaso universitario y en el amplio espectro de trastornos incluso desde la esfera física, pasando por supuesto, a la emocional.
En algunos hogares, muchos padres están observando el cambio de actitud de sus hijos, la forma de afrontar los problemas y el grado de frustración tan grande que les lleva a hacer cosas que nunca han hecho.
Malas actitudes, no respeto a la autoridad, agresividad y malos tratos hacia los progenitores y trastornos de conducta o personalidad. En el colegio, hiperactividad, angustia, fracaso escolar y malas habilidades sociales.
Observamos que la conducta va evolucionando a una dependencia desmedida hacia la tableta o el móvil.
El ordenador siempre encendido, la comunicación vía…, bueno, ya saben, aunque es cómoda, está llevando a muchos jóvenes a tener verdaderos problemas de conducta por el mal uso que hacen de ella.
En fin, ¡quién le pone el cascabel al gato!, es harto imposible, pero esto es como todo. Mucho relativismo y poco cambio a nivel estructural. Después, el final de esta película les aseguro que está por venir.
No sabemos qué pasará en breve, pero les aseguro que es una situación incontrolable. Y hablando de control… es conveniente supervisar en nuestros hijos las horas que pasan delante de la pantalla de lo que sea, me da igual… tiempo al tiempo, porque la culpa no es de nadie, pero la responsabilidad es de todos….
Veremos pues.
