La violencia familiar es ejercida en el ámbito más privado y es un ejercicio de poder asimétrico, siendo las mujeres y los niños los más afectados según las estadísticas que manejamos. Tienen un carácter destructivo, y el daño colateral es totalmente devastador, descontrolado y terriblemente tóxico hasta para los que lo viven desde fuera y conocen la problemática.
Se han hablado de mitos y estereotipos que todos conocemos y debemos tener en cuenta. Las familias desfavorecidas, enfermedad mental que lo justifica y demás.
A nivel técnico, hay deferentes teorías que tratan de explicar de forma más o menos coherente el porqué del maltrato generacional, y más aún, por qué se produce este fenómeno llamado violencia generacional. Siempre se nos ha explicado de forma sencilla los diferentes tipos o formas de violencia que nos podemos encontrar dentro del contexto más privado como es el contexto familiar, analizando dos formas claves violencia-agresión y violencia-castigo, como dos parámetros bimodales de esa articulación desmesurada que se hace de la fuerza, control, dominio, agresión, utilizadas como ejercicio de sometimiento al más débil.
Se habla también del famoso ciclo de la violencia que todos conocemos y forma una triada de retro-aprendizaje. Escalada- gestación de la dependencia y aislamiento, afirmación constante del dominio-explosión-reacción incontrolada del tipo que sea, descenso-arrepentimiento y luna de miel. Intento de minimizar el sentimiento de culpa si lo hubiese.
La terrible desigualdad entre el comportamiento de varones y mujeres, si es cierto que estadísticamente es superior y se decanta claramente la balanza hacia un lado.
Aspectos culturales, la sociedad y el concepto de lo claramente diferente es lo que realmente se entiende como supervivencia o superioridad.
Quiero a provechar para introducir un concepto que entiendo puede ser clave a la hora de entender este fenómeno.
Mi interpretación sobre este tema en el que ya llevo algunos años trabajando en ello, es meramente cultural, casi invisible la transmisión de los valores sociales y educativos que dan ventaja al varón en muchas ocasiones y dado que de forma pedagógicamente oscura, al varón se le ha transmitido un germen tóxico que reproduce siempre que se ve en peligro o superado ampliamente por una mujer. Es simplemente esa semilla tóxica que en la noche de los tiempos se ha perpetuado en las diferentes sociedades.
De una forma o de otra la mujer y la descendencia es producto del alter ego de muchos varones que perpetúan la especie sin más.