Hoy os traigo un clásico de las letras rusas, Ana Karenina de Lev Tolstoi. Este es uno de esos libros que cuanto más se lee y se relee más lecturas se sacan.
¿Qué nos vamos a encontrar? Descubriremos a un personaje principal muy potente y lo suficientemente importante como para dar el título al libro, Ana Karenina. Pero también hallaremos a otros personajes con una fuerza arrolladora, como pueden ser Vronsky o Levin.
Todos, sin haber leído esta novela, tenemos una idea de lo que puede tratar, una historia de pasión y adulterio que llevará a la protagonista a un desenlace trágico. Pero también encontraremos la historia de Konstantin Levin, que representa una faceta más introspectiva y reflexiva de la narrativa donde sacará temas como la vida rural, sus dilemas existenciales y planteamientos éticos. Algunos dirían que ese personaje ese el alter ego del mismísimo Tolstoi.
El autor hará un juego de espejos en el que contrapone la vida de Moscú con la vida de San Petersburgo, y la vida del matrimonio conformado por Ana y Karenin con la historia de amor de Levin y Kitty.
Algunos de los temas de esta novela son la incapacidad o la problemática que conlleva llevar la teoría a la práctica, una crítica brutal a la alta sociedad rusa y al progreso, plasmado, en este último caso, en el tren (otro de los grandes protagonistas de la novela) para reflejar todos los cambios a los que se enfrenta la sociedad rusa. Desde esta perspectiva se puede considerar a Tolstoi como el gran sociólogo de su época.
