- La vegetariana, donde hablará el marido de la protagonista.
- La mancha mongólica, aquí tendrá la voz narrativa el cuñado.
- Los árboles en llamas, entrará en escena la hermana.
No os voy a engañar, La vegetariana, de la autora ganadora del Premio Nobel de Literatura Han Kang, es una obra bastante curiosa. La autora utiliza el símbolo del vegetarianismo para plasmar la presión social a la que en muchas ocasiones nos vemos sometidas las mujeres y mostrar todas aquellas críticas y situaciones de tensión que en numerosas ocasiones estamos obligadas a vivir.
Para ello, divide la novela en tres partes:
Lo curioso de todo esto es que vemos la reacción de estos tres personajes sin darle ni siquiera voz a la que realmente está tomando la decisión.
En definitiva, es un historia incómoda de leer y bastante perturbadora pero que merecerá la pena dedicarle nuestro tiempo ya que es de estos libros que se quedan rondando en tu cabeza una vez que los acabas. Esto es gracias a la carga visual y poética que posee y es que la autora surcoreana utiliza la crudeza y la dureza de las situaciones para acabar con un final potente y bastante apoteósico.