El año 2023 ha finalizado con 1.145 fallecidos en las carreteras españolas, lo que supone la misma cifra de muertos en siniestros de tráfico que en 2022, como ha dado a conocer este jueves el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en la presentación del balance de Seguridad Vial correspondiente al pasado ejercicio.
En el caso de las carreteras de Castilla-La Mancha, el pasado año se cobraron 91 víctimas mortales, frente a las 80 del 2022 y las 81 de 2021. Desde el año 2017, cuando en la región fallecieron 112 personas en accidentes de tráfico, no se había registrado una cifra tan alta.
El titular del Interior ha señalado que en 2023 se produjeron 1.048 siniestros mortales en las carreteras españolas, en los que fallecieron 1.145 personas y otras 4.495 resultaron heridas graves.
“Hemos tenido más desplazamientos que en 2022 y no ha habido más fallecidos que en 2022. Son malos datos, como lo son todos los años, pero es necesario contextualizarlos para adoptar las medidas necesarias y corregirlos en lo posible”, ha subrayado Marlaska.
El ministro del Interior ha destacado que el 2023 es el mayor año de movilidad vial desde 2014 pero es el quinto más bajo en siniestralidad desde ese periodo. “La mayoría de siniestros viables son evitables”, ha sentenciado.
El Ministerio enmarca las cifras de 2023 en un contexto en el que han aumentado un 2 por ciento los desplazamientos de largo recorrido, el parque de vehículos (un 1,7%) y el censo de conductores (un 0,4%). En concreto, se realizaron 448,7 millones de desplazamientos por carretera, con un parque de vehículos que se sitúa en los 36,6 millones y un censo de conductores que se eleva hasta los 27,8 millones.
“Los siniestros de tráfico en su mayoría son evitables y reducir esas trágicas cifras está en nuestras manos si todos redoblamos nuestros esfuerzos con ese objetivo”, ha apuntado Marlaska, quien ha hecho un llamamiento a la “responsabilidad” de los conductores.