El 2020 ha sido un año repleto de incertidumbres, de obstáculos, de retos personales y profesionales para todos. Sin embargo, haciendo un balance positivo, si hay un dato que arroje algo de luz al 2021 es la concienciación social por la salud y por el autocuidado personal a raíz de la pandemia.
Barómetro
Según los últimos resultados recogidos en el ‘IV Barómetro sobre el Autocuidado de la población española’ elaborado por PiC Solution, marca especializada en productos para el autocuidado de la salud, el 74,7% de los castellanomanchegos se preocupan más por su salud a raíz de la pandemia.
En este contexto, los castellanomanchegos han tomado conciencia no solo de la transmisión de la COVID-19, sino que se han asegurado de llevar un control más exhaustivo de sus niveles de salud. Así, el 52,7% controló más la temperatura (siendo ésta un posible síntoma de la Covid-19), el 37,4% el peso (estando la obesidad asociada a un pronóstico de la enfermedad) y un 16,5% de los encuestados la tensión (siendo la hipertensión un factor de riesgo). Por el contrario, un 25,3% dice que no se preocupa por sus niveles de salud.
Los jóvenes se controlan la temperatura
En este sentido, y a nivel general los jóvenes de 18 a 24 años son quienes en mayor medida dicen llevar un control de su temperatura corporal desde el inicio de la pandemia (54,7%), mientras que a partir de los 55 años aumenta el porcentaje que dice llevarlo de su peso y de la tensión. De este modo, entre los de 65 o más años un 38,9% dice controlar de forma más exhaustiva su tensión y un 32,5% su peso.
Si realizamos una comparativa del autocuidado y control de la salud entre las distintas CCAA, los encuestados de Castilla La Mancha (52,7%) son, tras Andalucía (52,9%) y Madrid (58,5%) quienes más controlan su temperatura. Por el contrario, los encuestados de Canarias (34,6%) y Baleares (33,8%) son quienes se muestran más despreocupados.
Los castellanomanchegos están preocupados por su propia salud y también por la de sus seres queridos
De una forma u otra, la pandemia ha provocado que la sociedad sea más empática, más consciente y más responsable tanto uno mismo como con los que nos rodean. De hecho, el 38,5% de los castellanomanchegos aseguraron estar más preocupados por la salud de sus familiares (por tener cerca a personas de riesgo) y el 47,2% tanto por su salud propia como la de los suyos. Del total de los castellanomanchegos, solo un 4,4% de la población dice no estar preocupado ni por su salud ni por la de sus familiares, porque es algo en lo que no piensan.
A nivel general, y coincidiendo con el resto de comunidades, el porcentaje de mujeres que se preocupa más por su salud desde que empezó la pandemia es superior al de hombres (75,5% frente al 68,9% de los hombres). Significativamente, y según los datos del estudio, los jóvenes de 18 a 34 años son quienes en mayor medida se muestran más preocupados por sus salud desde el inicio de la pandemia (79,4% entre los de 18 a 24 años y 76,6% entre los de 25 a 34 años). Por el contrario, los de 45 a 54 años son los que más dicen no estar más preocupados por su salud (34,4%).
Con enfermedades crónicas
Además, quienes padecen alguna enfermedad crónica, son quienes en mayor medida dicen haberse comenzado a preocupar más por su salud desde que empezó la pandemia. Así lo afirma un 78,4% de la población castellanomanchega con enfermedades crónicas, mientras que este porcentaje disminuye al 70,8% entre la población no considerada de riesgo. Cabe destacar que en Castilla La Mancha, el 6,6% de los entrevistados padece hipertensión, el 11% asma, el 6,6% hipercolesterolemia (colesterol alto), el 8,8% obesidad y el 4,4% diabetes; enfermedades crónicas ligadas a una mayor incidencia del virus en aquellas personas que la padecen.
La prevención es crucial para frenar el virus:
Ante el riesgo de contagio en la población, tanto a nivel nacional como mundial, la sociedad ha incorporado algunas medidas de prevención y seguridad para minimizar el impacto que pueda llegar a tener el virus. Así, según el estudio, la población castellanomanchega ha hecho los deberes: más del 80% de los castellanomanchegos aseguran llevar mascarilla para protegerse, incluso en las relaciones sociales y familiares; más de un 68% evita salir de casa y el 73,6% limita los grupos sociales en los que relacionarse. Además, el 73,6% usa desinfectantes y geles hidroalcohólicos de forma continua, una medida implantada en la mayoría de establecimientos públicos y que más de la mitad de la población acostumbra a usar con asiduidad.
En cuanto a las diferencias por sexo, destaca que son las mujeres quienes en mayor medida dicen usar siempre mascarilla (84,2% frente al 77,8% de los hombres) y utilizar desinfectantes y geles hidroalcohólicos de forma continua (78,2% frente al 66,9% de hombres), para cuidar su salud e intentar protegerse del Covid-19. En general, las mujeres españolas conceden más importancia que los hombres a la todas las prácticas que engloba el autocuidado. Y, por edad, los segmentos de 55 años en adelante son quienes más importancia otorgan a todas las prácticas de autocuidado propuestas, y especialmente en el caso de realizarse chequeos médicos periódicos y de controlarse de forma habitual parámetros de salud como el peso, la tensión o el azúcar.
Implantación
Sin duda, la lucha contra el virus ha desembocado en que la población haya implantado éstas y otras medidas preventivas como nuevos hábitos sociales dentro de su rutina de forma inconsciente. Según las cifras, el 81,3% asegura lavarse las manos con mayor frecuencia, el 42,9% mide más su temperatura y otros parámetros de salud e incluso el 68,1% asume desinfectar todo lo que toca. Además, otro 48,4% asegura lavar más su ropa desde el inicio de la pandemia e incluso la pandemia ha favorecido a aquellos que necesitaban ponerse en forma: un 39,6% cuida más su alimentación.
Una nueva era para la digitalización sanitaria
La pandemia también ha impulsado los avances tecnológicos de forma exponencial: las empresas implantaron el teletrabajo de forma sistemática, las reuniones con amigos pasaron a ser por videollamadas, las clases escolares virtuales y las ponencias profesionales se transformaron en webinars, pero ¿cómo ha influido esta digitalización dentro del sector sanitario?
Según este último estudio realizado, el 41,7% de los castellanomanchegos suelen constatar información en internet sobre el autocuidado y un 12,1% ha empezado a hacerlo a raíz de la pandemia. Además, a la hora de buscar información sanitaria, un 45,1% de los castellanomanchegos se decantan por hacerlo a través de blogs profesionales, un 50,7% en páginas profesionales y más del 25% en webs de marcas y laboratorios.
Y en cuanto a la atención médica, la tendencia es similar: el 29,6% de los encuestados castellanomanchegos localiza médicos especializados a través de internet, algo que no es de extrañar, puesto que el 53,8% de los encuestados, después de visitar a su médico, consultan también su diagnóstico por Internet.
