Andrés Prado, director del Área de Informática de la UCLM y responsable de la gran prueba de esfuerzo a la que se ha visto abocada la comunidad universitaria en este momento extraordinario que vive España por el coronavirus, ultimaba ayer el soporte directo para que los profesores de esta institución académica pudieran impartir sus clases. Y lo hacía mediante videoconferencia y con todo el equipo que compone el área de tecnología de todos los campus de la Universidad castellano-manchega.
Mientras, atendía a sus hijas que estudiaban en la parte de debajo de su vivienda y explicaba a este digital que “no solo se trata de montar plataformas de tecnología sino de acercarla a nuestros docentes, de facilitarles su uso y en eso estamos ahora mismo. Si, está siendo una labor compleja”, reconocía.
Prado se refería al esfuerzo tan importante que estaba haciendo la Universidad regional en los últimos días para pasar de impartir clases de manera presencial a hacerlo on line destacando la ventaja que había supuesto el poder apoyarse en algunos de los proyectos e iniciativas que tenían en marcha desde hace tiempo, como el uso de la videoconferencia, una herramienta imprescindible en una universidad con cuatro campus en otras tantas provincias. “La videoconferencia formaba parte de nuestra actividad diaria”, sostiene.
Redimensionar la capacidad de la institución
Con todo, lo más relevante de esta etapa, que no ha hecho nada más que comenzar, ha sido el hecho de poder redimensionar la capacidad de la propia institución académica y de valorar la actividad que se llevaba a cabo a diario, algo que ha permitido soportar un picos muy altos en el uso del teletrabajo y también de la actividad “en linea”, permitiendo que ahora los esfuerzos se dirijan a responder a las necesidades de los docentes.
Este ha sido el reto más fuerte de esta semana, -reconoce a Lanza el responsable del Área Informática de la UCLM,- porque nosotros somos una universidad presencial. Tenemos plataformas de soporte para la docencia, pero ser capaces de casi, casi, convertir en unos días una universidad presencial en una universidad on line ha sido un gran reto. Me consta que el viernes se dieron algunas clases virtuales y que esta mañana –lunes- también.
Herramientas on line
La nueva situación que vive el país y que, entre otras medidas, ha llevado a la suspensión de las clases en todos los ámbitos ha propiciado el uso de las herramientas on line “lo más rápidamente que hemos podido con la limitación de recursos que hemos tenido”, aclara Andrés Prado quien considera básico que para que la comunicación sea efectiva se haga de forma breve y eficiente y sea dirigida a una actividad concreta. “A los estudiantes, por ejemplo, les estamos indicando qué cuestiones deben tener como básicas para seguir las clases o acceder a recursos en línea, bibliográficos etc”.
El teletrabajo, de su parte, es una opción que la UCLM ya contemplaba dentro de su política de recursos humanos, una circunstancia que ha facilitado su uso por parte del personal docente, administrativo y de servicios que, en muchos casos, ya hacía uso de equipos portátiles mientras que muchos trámites en la Universidad se hacen a través de plataformas en línea.
Funcionando y valorando
¿Satisfecho de cómo ha funcionado todo este primer día?. Está funcionando y la comunidad universitaria lo está valorando. La gran satisfacción es que un profesor te llame y te diga “estoy realmente asombrado de lo que habéis conseguido, algo que no es muy habitual”, sostiene Prado.
Y las ¿dificultades?. Si, se están produciendo algunas incidencias, pero las estamos solucionando.
Pero lo que se ha puesto de manifiesto este primer día de clases virtuales -aclara- es que nuestra comunidad docente se ha volcado y desde que les hemos dicho que les vamos a dotar de herramientas, está dando el paso adelante para utilizarlas. Hay algunos, incluso, que han dicho “quiero dar clase” y esta mañana las ha dado, concluye.