Asaja Castilla-La Mancha ha criticado este jueves que la propuesta de Agroseguro para la nueva línea del seguro del ajo supone «poner en peligro la única herramienta con la que cuentan los productores ante las condiciones climatológicas adversas».
Así se ha pronunciado la organización agraria después de que, en la reunión del Grupo de Normativa para tratar este asunto, Agroseguro pretendiese «imponer una propuesta de modificación para la línea 330 del cultivo del ajo muy lesiva para los agricultores».
Asaja, en un comunicado, ha explicado que el seguro del ajo, anterior línea 307, requiere una modificación, pero la opción que plantea Agroseguro pretende corregir el desequilibrio de una serie histórica de veinte años de forma brutal, lo que pondría en entredicho la efectividad de una de las líneas más importantes de los seguros agrarios.
Concretamente, la modificación presentada supone una nueva tabla de peritación de la variedad de ajo spring, diferenciándola así del ajo morado. La segunda corrección sería una nueva tabla que reduce las bonificaciones y aumenta los recargos y que implica un aumento de las tarifas.
Y, por otro lado, hay una serie de medidas que para Asaja «son las más perjudiciales» para un cultivo reconocido por su carácter social, por los miles de puestos de trabajo que genera y por crear riqueza en el medio rural y que, de salir adelante, los agricultores se verán obligados a valorar si les es rentable la contratación de la póliza.
En este sentido se encuentra la obligatoriedad de la aplicación de la deducción por aprovechamiento residual que, hasta ahora, era opcional y que pasa a un 30%.
Asaja plantea que debe seguir siendo opcional, pues tal y como está propuesta, ante un siniestro, el agricultor, independientemente de que sepa con seguridad si su producción puede o no aprovecharse y tenga o no que destruirla, tendrá esa deducción.
Esto supone que, en el caso de que los daños alcancen un 100% y la producción no pueda ser aprovechada, tan solo obtendrá una indemnización del 70%, con lo que no cubrirá ni los costes de producción.
Por último, Asaja ha recordado que estas medidas vienen precedidas de dos años de subidas en las tarifas que, según las zonas, han supuesto entre un 29 y un 40% de incremento y por eso ha pedido a la Consejería de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural que refuerce las ayudas para seguros agrarios y ganaderos como ya han hecho otras comunidades autónomas como Castilla y León, y conseguir así que no decaiga la contratación de seguros, ya que son la única herramienta con la que cuenta el sector ante cualquier catástrofe.