El Gobierno de Castilla-La Mancha va a colaborar con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) para argumentar, en las negociaciones de la reforma de la Política Agrícola Común en Bruselas, que es necesario mantener el presupuesto de la misma para el periodo 2021-2027 para garantizar que el sector pueda seguir manteniendo su actividad diaria.
Así lo ha manifestado el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, durante su asistencia a la presentación del Anuario 2018 de la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), celebrada esta mañana en el Consejo Económico y Social de Madrid bajo el nombre ‘El futuro de la PAC. La agricultura familiar como garantía de sostenibilidad y progreso’, según ha informado en nota de prensa el Gobierno regional.
“Tenemos que hacer posible que la PAC siga siendo prioritaria en la UE”, ha dicho Martínez Arroyo, quien ha continuado explicando que el Gobierno regional trabaja para que recursos públicos que se asignan a agricultores y ganaderos no disminuyan con respecto al periodo actual.
En esta línea, ha insistido en que desde el Gobierno de Castilla-La Mancha se va a colaborar en todo momento con el Ministerio para conseguir ese objetivo. “Es necesario que una parte de nuestros impuestos, de los recursos públicos de los presupuestos europeos, se destine a los agricultores y ganaderos ya que no se puede perder ni un solo céntimo para este sector tan prioritario”.
Tras defender que Castilla-La Mancha es rural y que parte de su desarrollo depende de que agricultores y ganaderos sigan generando actividad día a día en nuestros pueblos, ha agradecido el compromiso de UPA con “quienes se juegan su dinero en la agricultura” y la defensa del sector agrario que comparte con el Gobierno regional, más ahora en un momento “relevante” en las negociaciones del nuevo periodo de la PAC de la que dependerá parte de la renta de los agricultores y ganaderos.
