La consejera de Bienestar Social del Gobierno de Castilla-La Mancha, Aurelia Sánchez, ha participado este martes en la sede del Comité de las Regiones en una sesión centrada en las políticas de cohesión social impulsadas por las regiones que conforman la Unión Europea en la que los participantes han presentado casos de éxito que han despertado el interés de este órgano.
En el caso de Castilla-La Mancha, Sánchez ha puesto en valor dos de las políticas sociales de su mandato al frente de la Consejería de Bienestar Social, como son la Estrategia contra la Pobreza y la Ley de Protección y Apoyo Garantizado para Personas con Discapacidad.
Esta sesión, circunscrita en el seno de la Semana de las Regiones celebrada en Bruselas, ha sido parte de la agenda semanal para poner en valor la implementación de políticas sociales a nivel regional que “han contribuido a construir una Europa más social”, tal y como ha destacado el Comité de las Regiones en su convocatoria.
Esta reunión de trabajo pretendía aunar estrategias y buenas prácticas de Gobierno autonómicos a través de textos legislativos puestos en marcha en sus radios de acción.
Sánchez ha intervenido en una mesa redonda con una quincena de altos cargos de países como Serbia, Italia, Francia, Grecia, Austria o Polonia, como el presidente de la región del Veneto, Roberto Ciambeti; el gobernador de Carinthia, Peter Jaiser; o el director regional del Centro de Políticas Sociales de Polonia, Adam Szponka.
200 asistentes
En su intervención ante cerca de 200 asistentes, Aurelia Sánchez ha urgido a conseguir una Europa más inclusiva, algo “en consonancia” con lo que pasa en Castilla-La Mancha, cuyo plan es “conseguir una Comunidad Autónoma que cuenta con todas las personas diferentes”.
Así, aunque ha reparado en que hay “diferencias” entre las poblaciones de las distintas regiones, ha aseverado que debe primar la igualdad de oportunidades.
“Estas políticas de cohesión son fundamentales para poder conseguir los objetivos de desarrollo sostenible, sobre todo los más sociales”, ha afirmado, abogando por lograr “más inclusión y sostenibilidad” en todos los territorios europeos.
Las políticas de cohesión son “muy importantes para poder contribuir a estos objetivos”, y en Castilla-La Mancha se está “fortaleciendo la justicia social, la prosperidad, más paz y una ciudadanía con mejor calidad y condiciones de vida”.
Cohesión frente al reto demográfico
Aunque ha reconocido que cada región “es distinta” y la política de cohesión “ha beneficiado mucho”, quedan aún “asuntos pendientes” como el reto demográfico.
Castilla-La Mancha es una región “con mucha desigualdad en oportunidades” por esta despoblación y el envejecimiento de las zonas rurales, razón por la cual hay que prestar especial atención en potenciar estas políticas europeas de cohesión hacia estos objetivos.
Sobre las dos estrategias castellanomanchegas que han suscitado el interés del Comité de las Regiones, ha afirmado la consejera que están contribuyendo en la Comunidad Autónoma a que haya “menos desigualdad” y a conseguir una sociedad “más inclusiva”.
En declaraciones a los medios antes de su participación en la cita, ha dicho que la Estrategia contra la Pobreza cuenta con un total de 58 medidas que requieren de un total de 77 equipos de trabajo para cristalizar, con unos profesionales que “están mejorando las condiciones de vida de las personas de la región”.
Sobre la ley que ofrece garantías para que las personas con discapacidad puedan seguir siendo atendidas tras el fallecimiento de sus padres, ha puesto en valor que se trata de una medida pionera y novedosa, además de que ha suscitado gran interés dentro del seno de la Unión Europea.
