Según la encuesta, el 33,5% de la población residente en Castilla-La Mancha estaba en riesgo de pobreza o exclusión social en 2018, dato que refleja una bajada del 0,4% con respecto al año anterior, y aunque CCOO reconoce que ha mejorado el riesgo de pobreza en general en la Comunidad Autónoma, ha destacado el empeoramiento entre el colectivo que más dificultades tiene.
“Esta evolución nos puede llevar a una dualidad con personas que mejoran y a las que les llega la recuperación y que conviven con otras que ven agravadas sus carencias materiales”, ha afirmado la secretaria regional de Empleo y Políticas Sociales de CCOO en la región, María Ángeles Castellanos.
A su juicio, “la pobreza se combate con empleo digno, cualquier cifra de carencia material severa es excesiva en un entorno como Castilla-La Mancha, una comunidad con indicadores de crecimiento económico positivos, con un nivel de producción superior al previo a la crisis, pero a juzgar por los datos esta riqueza no ha llegado a las personas”.
“No se trata de hacer caridad, se trata de hacer justicia y de que las empresas mejoren la calidad del empleo”, ha indicado Castellanos, quien ha añadido que al tiempo hay que seguir trabajando desde las políticas públicas para que nadie se quede atrás.
En este sentido, ha recordado que desde CCOO junto con UGT promovieron una Iniciativa Legislativa Popular (ILP), a día de hoy pendiente de tramitación parlamentaria, para aprobar una prestación de ingresos mínimos que elimine los vacíos de cobertura en la protección por desempleo.
Por otro lado, el reto demográfico al que se enfrenta Castilla-La Mancha está muy vinculado a la renta de las que disponen los hogares y al riesgo de pobreza, ante esta situación las personas más jóvenes de Castilla-La Mancha emigran a otras regiones como Madrid, ha destacado el sindicato en nota de prensa.