Para el sindicato CSIF la evolución del desempleo es positiva y que Castilla-La Mancha sea la segunda comunidad autonómica en la que más ha bajado el paro porcentualmente, sólo por detrás de Cantabria, aunque se ha producido un estancamiento en el sector público, que no crece al mismo ritmo que el sector privado y así, mientras 522.700 personas dependen del sector privado, el mejor dato desde 2008, los 158.800 asalariados del sector público están muy lejos de los niveles alcanzados en el periodo 2009-2011 y de hecho no es la mejor cifra de los últimos años (160.400 en el tercer trimestre de 2017).
Además, para el sindicato también se observa un alto porcentaje de temporalidad con diferencias muy marcadas dependiendo de los trimestres de muestra: los segundos trimestres de los años 2017 (-5.4%) y 2018 (-7%), y el primero de 2016 (-9.4%), supusieron las mayores caídas de empleo público de los últimos años.
CSIF subraya la necesidad de contar con unos servicios públicos de calidad para atender las necesidades de la ciudadanía y garantizar unos estándares básicos dentro de la sociedad del bienestar.
El número de desempleados en Castilla-La Mancha bajó en 4.000 personas en el último trimestre del año, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) y el número total de parados se sitúa en 160.000, 36.500 menos respecto al último trimestre de 2017.