Así, una patrulla de Seguridad Ciudadana observó un vehículo que circulaba por las calles de Palomarejos. Al encontrarse en horario de movilidad restringida, los agentes le dieron el alto, momento en que trató de emprender la huida a toda velocidad, siendo interceptado a los pocos metros, según ha informado la Policía en nota de prensa. En un bolsillo llevaba 11,88 gramos de cocaína y la matrícula del vehículo había sido manipulada, por lo que ha sido detenido.
De igual modo, tres jóvenes de Toledo que viajaban a bordo de un vehículo por la N-400 se toparon con un control de la Policía Nacional establecido para comprobar que se respetan las restricciones de movilidad establecidas por las autoridades sanitarias. Unos metros antes de llegar al lugar donde se encontraban los agentes, los jóvenes arrojaron una bolsa por la ventanilla.
La maniobra no pasó desapercibida para los Policías que se encontraban en el control, por lo que dieron el alto al vehículo y recuperaron el objeto que habían arrojado, en cuyo interior hallaron 26 gramos de cocaína, motivo por el que han sido detenidos como presuntos responsables de un delito de tráfico de drogas.
De otro lado, agentes de la Policía Nacional que se encontraban realizando labores de prevención de la delincuencia en Talavera de la Reina observaron a dos personas, padre e hijo, que se encontraban maniobrando con una furgoneta en la vía pública.
Al acercarse al vehículo, pudieron comprobar que los dos varones se disponían a descargar 62 plantas de marihuana para introducirlas en una vivienda.
Por este motivo, ambos han sido detenidos como presuntos autores de un delito contra la salud pública.
