El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha anunciado este martes que a partir del próximo 1 de julio va a suspender el control de vehículos por cámaras al Casco Antiguo de la capital.
Tras una reunión mantenida con la empresa de la ORA, que instaló el sistema de cámaras en la parte alta de la capital, se ha acordado que quede en suspenso dicho sistema, aunque se seguirá controlando que en el Casco sólo aparquen los vehículos autorizados en la zona verde.
“Los residentes tendrán preferencia para aparcar y los 30 minutos para estar en el casco dejan de estar operativos desde el 1 de julio y ya no se pondrán denuncias por estar en tránsito en esta zona de la ciudad”, ha declarado Dolz durante una rueda de prensa.
Aunque quede en suspenso a partir del próximo 1 de julio, las cámaras no se van a retirar, ya que el nuevo equipo de Gobierno local conquense quiere utilizar la información de tránsito en el Casco para temas de movilidad.
8.000 MULTAS EN UN AÑO
Aunque el sistema de cámaras entró en funcionamiento el 1 de junio de 2018 no fue hasta un mes más tarde, el 1 de julio, cuando lo hizo de forma definitiva tras 30 días de pruebas.
Según ha informado Dolz, en este casi año de vigencia se han interpuesto en torno a las 8.000 denuncias por estar circulando por el Casco Antiguo más de 30 minutos, el máximo permitido.
El aparcamiento en la zona verde del Casco se va a controlar “cómo hasta ahora”, ha relatado el primer edil, “donde un trabajador de la empresa hará el recorrido por la zona y controlará que los vehículos que están aparcados son los que están autorizados”.
Por último, ha añadido Dolz que las cámaras “quedan en suspenso”. “No va a haber ninguna denuncia por entrar o salir del casco a partir del 1 de julio y sólo habrá denuncias si se aparca mal dentro de la parte alta”, ha insistido. El primer edil también ha informado que seguirán presentes las zonas de no aparcamiento, como son la Plaza Mayor y la Plaza de Ronda.