Los mayores de 65 años y con patologías previas han sido los grandes perjudicados de esta batalla y el coronavirus se ha cebado especialmente con este colectivo. En Castilla-La Mancha, desde el inicio de la pandemia y hasta el 2 de diciembre, se han registrado 1.612 fallecimientos en residencias de mayores que habían dado positivo previamente en las pruebas del COVID-19. La inmensa mayoría de estos fallecimientos se produjeron entre los meses de marzo y mayo, cuando la irrupción de este virus desconocido nos pilló a todos indefensos y sin material ni medidas eficientes para plantarle cara. Ahora, diez meses después, e inmersos en la curva descendente de la segunda ola de contagios, las residencias de mayores de Castilla-La Mancha han conseguido resistir el envite de la segunda ola gracias al mayor conocimiento que hay sobre la enfermedad y a las medidas puestas en marcha para evitar contagios.
“La segunda ola nos ha pillado con mucho más conocimiento sobre el virus y también con mucha más protección ante él”. Así define la consejera de Bienestar Social del Gobierno de Castilla-La Mancha, Aurelia Sánchez Navarro, en declaraciones a Lanza, cómo se está viviendo la segunda ola del COVID-19 en los centros residenciales de la región en contraposición a cómo se vivió la primera ola, la cual “nos pilló a todos desprevenidos, siendo especialmente cruel con las personas mayores y, todavía más, con las que se encontraban en residencias”. Ahora, afortunadamente, “hay más conocimiento, experiencia, protección y organización. Hemos aprendido mucho de la primera ola y estamos más preparados”, considera.
La afectación ha cambiado
La consejera señala que la afectación ha cambiado desde el punto de vista territorial. En la primera ola, las residencias más afectadas por el coronavirus fueron las ubicadas en las provincias de Ciudad Real y Albacete, mientras que en esta segunda ola en las de Ciudad Real y Albacete apenas hay contagiados y es en la provincia de Toledo donde más residencias afectadas hay y también en la de Cuenca. “Esto quiere decir que los mayores de las residencias donde hubo mayor incidencia en marzo, abril y mayo han generado una especie de inmunidad”, destaca Sánchez Navarro, al tiempo que añade que, además, los mayores diagnosticados de COVID-19 están teniendo una sintomatología mucho más leve, incluso muchos de ellos pasan la enfermedad completamente asintomáticos.
En el momento de la entrevista (1 de diciembre), la provincia de Ciudad Real tan solo contaba con diez casos positivos de COVID-19, entre residentes y trabajadores, repartidos en seis residencias de la provincia. Una cifra realmente baja. A nivel regional, ese mismo día, se registraban 58 residencias afectadas y un total de 240 positivos por COVID-19, pudiendo ser residentes o trabajadores.
Preparados para una posible tercera ola
Ante la posibilidad de la llegada de una tercera ola tras las fiestas navideñas, según auguran muchos expertos, la consejera asegura que desde el Gobierno de Castilla-La Mancha lo tienen “todo preparado” para seguir protegiendo a los mayores de las residencias, “aunque la mejor medida para protegerlos sería que todos cumpliéramos a rajatabla las medidas sanitarias que se impongan durante la Navidad y que podamos evitar la tercera ola”, apunta.
No obstante, en caso de que ésta llegue, desde el Gobierno de Castilla-La Mancha tienen todo preparado en cuanto a medios y a personal para trabajar igual que durante esta última ola. “Desde el Ejecutivo regional nos hemos esforzado para que esta segunda ola no nos pillara desprotegidos y así seguirá siendo en las sucesivas olas que se puedan producir”, comenta. “En la primera ola a todos nos pilló desprotegidos. No había material de protección suficiente en el mundo y desde el Gobierno regional se hicieron esfuerzos ingentes por conseguirlo. Ahora, afortunadamente, nos encontramos con protección suficiente gracias a la Ley de Reserva Estratégica de Material Sanitario para que no falte suministro de equipos de protección en hospitales, centros sanitarios y sociosanitarios. Además, se han puesto en marcha planes de contingencia para estar preparados ante posibles nuevas olas y un mayor conocimiento de los profesionales para poder gestionar estas situaciones en los centros residenciales”, asevera la responsable de Bienestar Social del Gobierno regional.
Vacuna
Según el plan de vacunación anunciado por el Gobierno de España, los residentes y trabajadores de residencias de mayores serán los primeros en recibir la vacuna contra el COVID-19. Una vacunación que se espera que llegue en el mes de enero y que ponga fin a la trágica situación que se ha vivido en el 2020. En este sentido, la consejera de Bienestar Social ha indicado que desde la consejería que ella dirige se está en constante comunicación con la de Sanidad, la cual será la encargada, junto al Ministerio de Sanidad, de dirigir el plan de vacunación en Castilla-La Mancha.
Al hilo de esta cuestión, Sánchez Navarro ha indicado que actualmente están inmersos en la campaña de la vacunación de la gripe, la cual este año está teniendo una incidencia bastante menor en las residencias de mayores debido a las medidas de protección que se han adoptado contra el coronavirus, como el uso de las mascarillas, la distancia social, el higiene de manos, así como la desinfección constante de los lugares por los que transitan los residentes.
Unas navidades diferentes
Por último y preguntada sobre cómo serán las navidades este año para los residentes de los centros de mayores, la consejera ha reconocido que serán “muy diferentes”, pero con la posibilidad, de que si la situación epidemiológica evoluciona favorablemente, se puedan hacer visitas puntuales a los familiares.
En caso de que esta situación no pudiera darse, Aurelia Sánchez ha indicado las navidades tendrán que ser “muy digitales”, destacando que todas las residencias cuentan con medios audiovisuales para poder establecer videoconferencias con sus familiares. “Tenemos que ser muy prudentes estas fechas navideñas para poder prevenir una posible tercera ola y que el 2021 sea el año de la vacuna y no de nuevos rebrotes del virus”, asevera.