El PSOE ganaría de forma holgada las próximas elecciones autonómicas del 26 de mayo en Castilla-La Mancha, según el barómetro preelectoral del CIS publicado este jueves. De esta manera, Emiliano García-Page, con un porcentaje de voto del 40,3%, según la encuesta, obtendría entre 15 y 18 diputados en las Cortes regionales, situándose la mayoría absoluta en esta cámara en 17 escaños. En caso de que los socialistas no lograran la mayoría absoluta, el actual presidente de la JCCM podría apoyarse en Unidas Podemos o en Ciudadanos, estrenándose ambos en las Cortes de Castilla-La Mancha con una horquilla de entre dos y tres escaños cada uno.
El CIS da en Castilla-La Mancha la victoria al PSOE que no logró en 2015, cuando el PP de Cospedal logró sacar 16 escaños, frente a los 15 que obtuvieron los socialistas, pero el acuerdo entre García-Page con Podemos, que consiguió dos escaños, hizo que el PSOE volviera al poder en la región, tras cuatro años de mandato ‘popular’ de María Dolores de Cospedal.
El PP de Paco Núñez obtendría en los próximos comicios el 29,8% de los votos, lo que le daría entre 11 y 14 diputados. En 2015, María Dolores de Cospedal se impuso con el 37% de los votos. Pese a este descenso de los votos, existse la posibilidad de que el PP pueda llegar al gobierno si se cumplen las mejores estimaciones del CIS, pudiendo pactar con Ciudadanos y Vox.
Por su parte, la candidatura de Podemos, que encabeza José García Molina, sería la tercera fuerza en las Cortes de Castilla-La Mancha y podría convertirse en ‘llave de gobierno’ para el PSOE. Según el CIS, la formación morada obtendría un 10,9% de votos y dos o tres diputados.
Ciudadanos también podría convertirse en ‘llave de gobierno’, aunque en este caso, tanto para el PSOE como para el PP. La formación naranja, con Carmen Picazo a su cabeza, lograría el 8,6% de los votos, obteniendo así dos o tres diputados.
Por último, Vox rozaría el diputado, aunque podría quedarse fuera del Parlamento regional pese a obtener el 6,8% del voto, según el CIS.
