Concretamente se trata de licitaciones, convocadas durante los años 2014 y 2015, relativas a: la construcción de la obra civil principal del ATC, por importe de 217.760.000 euros; el servicio de oficina técnica de obra y dirección de proyecto, por importe de 5.560.000 euros; el servicio técnico de supervisión de obra, por importe de 11.410.000 euros; y el suministro de los equipos principales de manutención, por importe de 9.000.000 euros.
El Consejo de administración de Enresa, que había actuado como órgano de contratación en todos ellos, ha decidido de este modo no adjudicar los expedientes, tal y como había adelantado el diario ‘El País’. A juicio del organismo, “el proyecto técnico que fue objeto de licitación ha sufrido una importante reformulación, fruto de la actividad de los órganos de control competentes durante el proceso de licenciamiento, y, por tanto, el proyecto no responde a la necesidad a satisfacer”.
“Una vez finalizado el análisis de los aspectos tanto técnicos como jurídicos, se ha concluido que dada la obsolescencia del proyecto, la formalización de los contratos resultaría contraria al interés público”, añaden.
No obstante, precisan que la decisión final sobre el futuro del Almacén Temporal Centralizado y su emplazamiento no corresponde a Enresa. En este sentido, recuerdan que cualquier actuación futura sobre el almacenamiento del combustible gastado y los residuos de alta actividad deberá estar alineada con las previsiones que se recojan en el nuevo Plan General de Residuos Radiactivos.
