El candidato a la presidencia del PP José Ramón García-Hernández ha explicado que la confianza de la gente se consigue recuperando los principios del PP que “nos han hecho ser grandes y reconocidos a nivel europeo”. “Unos principios con unas políticas muy modernas pero donde nuestros valores liberales, conservadores y del humanismo cristiano –los católicos tienen que volver a votarnos a nosotros–, sean perfectamente reconocibles”.
El candidato ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación antes de participar en un acto con afiliados en la sede del PP de Cuenca, donde ha estado junto al alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, y el vicepresidente de la Diputación de Cuenca, Julián Huete.
Tras admitir que la candidata María Dolores de Cospedal “seguirá teniendo mucho tirón” en Castilla-La Mancha, donde es presidenta del PP, se ha definido como “un tipo de Ávila” que está haciendo una gira por toda España explicando su proyecto.
Un PP fuerte
“Todos los candidatos, aunque no seamos lo mismo, queremos lo mismo: Queremos un PP mucho más fuerte, queremos un centro derecha donde la gente se vuelva a verse reflejada y donde pueda volver a confiar con nosotros, porque somos fundamentales para España”, ha enfatizado.
Dicho esto, ha apuntado que “estamos viviendo un momento donde nos están intentando arrinconar”, dejando claro que “una nueva democracia sin el PP no sería una democracia”.
Asimismo, ha indicado que él, que se ha definido “como el candidato de la ilusión”, tiene una propuesta “renovadora” que pasa por recuperar al afiliado. Así, ha abogado por reunir de nuevo a todo el centro derecha después del próximo 5 de julio, día en el que los militantes del PP votarán a los candidatos.