Las lluvias caídas durante la última semana y la bajada leve de las temperaturas han propiciado que el índice de propagación de incendios forestales en Castilla-La Mancha se sitúe en un nivel moderado. Las precipitaciones han permitido que los árboles y la vegetación vuelvan a unos niveles de humedad suficientes para que los incendios forestales no se propaguen en provincias como Guadalajara, Cuenca y Albacete. En el caso de Toledo y Ciudad Real, las lluvias han sido más escasas y el estado de la vegetación es similar al de semanas anteriores.
Con el avance de la semana, la influencia del anticiclón sobre la región va a provocar un incremento de las temperaturas. Para el comienzo del fin de semana, se espera un episodio de vientos procedente del oeste y del noroeste que va incrementar el riesgo de incendio forestal.
El verano comenzó el pasado 21 de junio, por lo es muy probable que las temperaturas asciendan de forma considerable en las próximas semanas y que las lluvias sean escasas en toda la región.

Castilla-La Mancha ha destinado para luchar contra los incendios forestales en época de peligro alto, muy alto y extremo, cerca de 40 millones de euros para labores de extinción para fortalecer un dispositivo con 250 medios aéreos y terrestres. También cuenta con unos 3.000 profesionales preparados para actuar ante cualquier emergencia en el medio natural de la región.
Consejeria de Desarrollo Sostenible Informacion Incendios Forestales
La importancia del mes de junio en la prevención de incendios
La prevención en Castilla-La Mancha tiene una gran relevancia en el mes de junio, al marcar el inicio de las labores agrícolas relacionadas con la cosecha de los cultivos de secano y de cereales. Con el fin de evitar que un posible incendio agrícola termine por afectar a la masa forestal, los agricultores deben adoptar una serie de medidas preventivas que pueden evitar la ignición de la vegetación.
Así, se recomienda que las parcelas que limiten con terreno forestal sean cosechadas a primera hora, y que se realice un pase de grada o cultivador en todo el perímetro una vez cosechada. Además, siempre que sea posible, avanzar en contra del sentido del viento, realizando fajas perpendiculares a su dirección.

Otra recomendación pasa por cosechar las parcelas desde fuera hacia adentro con el fin de que a medida que se avanza exista cultivo con capacidad de arder cerca de la masa forestal. Dentro de las zonas pedregosas es aconsejable reducir la velocidad de avance y levantar el peine de corte para reducir la posibilidad de que puedan saltar chispas por el roce del metal con las piedras.
En este aspecto, es recomendable disponer de una persona que pueda observar las labores atentamente para poder detectar de forma temprana la posible ignición y medios de extinción suficientes para poder controlar el posible conato.
Muy importante también es evitar el sobrecalentamiento de la cosechadora y aumentar la frecuencia de limpieza de ciertas partes de la máquina en los lugares donde se suele acumular el polvo y la paja.

Principales recomendaciones
La colaboración, la concienciación y la implicación de los ciudadanos resulta fundamental a la hora de prevenir contra los incendios. Por este motivo, es conveniente evitar actividades de riesgo en el medio natural. Si una persona observa humo en el medio natural debe llamar rápidamente al 112 y proporcionar la dirección más exacta sobre su ubicación. Hay que mantener máxima precaución si nos encontramos en el medio natural. Por tanto, es importante actuar con mucha precaución y responsabilidad ya que gran parte del territorio de Castilla-La Mancha se encuentra con riesgo alto o muy alto durante estas fechas.
Asimismo, no se debe realizar fuego en el medio natural, procurando llevar la comida preparada. Importante a su vez es no dejar los residuos, gestionándolos de la manera adecuada. También es necesario extremar las precauciones especialmente cuando nos encontramos con el IPP muy alto o extremo, siendo conscientes que cualquier negligencia o accidente puede provocar un incendio de graves consecuencias.
Los vehículos no deben aparcarse encima del pasto y no hay que tirar cigarros al suelo, pues se podría generar un incendio.
Durante el periodo de vacaciones, en el que la acumulación de personas es mayor, se deben extremar las precauciones en el medio natural, evitando cualquier actividad que pueda suponer un riesgo de incendio forestal como barbacoas, cocinar en la naturaleza, etc.…
Los días de tormenta en verano hay que extremar las precauciones en el medio natural pues, aunque llueva, pueden producirse incendios debido a los rayos y a las malas prácticas de las personas. Por tanto, si un ciudadano se encuentra en el monte y detecta humo tras una tormenta debe comunicarlo rápidamente al 112.
Por último, en el medio natural no hay que arrojar basuras ni realizar fuego para cocinar o preparar una barbacoa. Conviene recordar que los residuos en el monte y en el campo pueden provocar un incendio forestal de graves consecuencias.

