A preguntas de los medios, durante la rueda de prensa para dar cuenta de los acuerdos aprobados por el Consejo de Gobierno, la consejera ha hecho alusión a la resolución, publicada este martes en el Diario Oficial de la región, que limita, entre otras cosas, el número de visitas en las residencias de mayores de Castilla-La Mancha a una por residente y semana, y de duración máxima de dos horas.
«Ante el aumento de contagios desmesurado», ha explicado la consejera, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha tenido que tomar decisiones y medidas para proteger a las personas mayores.
«Entendemos que es una medida que no nos gusta porque a ninguno nos gusta estar en una sexta ola y tomar medidas, pero lo que no nos gusta es tener que lamentar a toro pasado el que no tomar medidas pueda suponer mayor afectación en la salud de nuestros mayores».
Así, ha señalado que en el momento en el que la sexta ola doble la curva de contagios y empiecen a disminuir los casos, el Gobierno regional empezará a flexibilizar las visitas y las salidas a los centros residenciales, donde este lunes había 1.445 casos confirmados.
De otro lado, la titular de Bienestar Social ha apuntado que los centros residenciales «son hogares» donde los mayores están rodeados de sus familiares, «no de sangre», pero sí de los que les cuidan cada día y «están bien atendidos», ha defendido.
Finalmente, ha dicho que los centros no han cerrado del todo las visitas a los familiares, y aunque considera que es «poco» una visita semanal, estas medidas –ha dicho– son necesarias para proteger a los mayores, con los que «nos gustar estar cuanto más tiempo mejor».