Así lo ha adelantado la consejera de Bienestar Social, Bárbara García Torijano, en rueda de prensa con motivo de la reunión del Consejo Regional de las Personas Mayores de Castilla-La Mancha.
La titular de Bienestar Social, que no ha querido adelantar las medidas que contendrá la nueva resolución de medidas preventivas contra la COVID-19 en centros residenciales porque están a la espera de los informes de Salud Pública, se ha mostrado confiada de que a partir del día 10 de octubre se puedan flexibilizar «bastante» tras la mejoría de la situación de la pandemia en estos centros.
«Estamos contentos porque desde hace quince días a hoy hemos notado una mejoría de casos», ha abundado la consejera, quien ha dicho que aunque «la cosa vaya bien» las medidas preventivas van a tener que seguir vigentes. «Todas las restricciones al cien por cien no se pueden suprimir», ha dejado claro García Torijano.