El Gobierno de Castilla-La Mancha ha colaborado en la integración laboral y formación profesional de más de 4.300 personas con algún tipo de discapacidad, gracias a las políticas activas de empleo que se han llevado a cabo en los dos años de legislatura del presidente Emiliano García-Page con una inversión de alrededor de 18 millones de euros.
Este colectivo es una prioridad para el Ejecutivo regional, que los considera trabajadores y trabajadoras altamente productivos, muy motivados en su empleo y que aportan un valor incalculable a las organizaciones en las que se integran.
En los dos años de Gobierno de García-Page se han impulsado los Centros Especiales de Empleo. Así, el año pasado se modificó la normativa de ayudas a los Centros Especiales de Empleo, para incluir mejoras en el sistema de gestión de las ayudas, entre ellas, agilizar la solicitud, el pago de las mismas y permitir que todos los trámites se realicen on-line. La nueva regulación, además, contempla incentivos, que no se publicaron durante la pasada legislatura.
En total, en 2016 se invirtió en el fomento del empleo en los Centros Especiales de Empleo más de 11,8 millones de euros en ayudas al mantenimiento de los puestos de trabajo, en la recuperación de las ayudas a la generación de puestos de trabajo, y en ayudas al establecimiento de unidades de apoyo a la actividad profesional de los centros.
En Castilla-La Mancha, en la actualidad, hay 93 Centros Especiales de Empleo, en los que trabajan más de 3.300 personas con discapacidad, el 35 por ciento de ellas, mujeres.
Otra de las actuaciones que se ha llevado a cabo en la legislatura ha sido las ayudas a la contratación indefinida de personas con discapacidad en el mercado ordinario de trabajo. La correspondiente a 2017 está abierta hasta el próximo 15 de noviembre, con un presupuesto de 700.000 euros. En concreto, de la de 2016, se han beneficiado a la fecha más de 100 personas, con una inversión que supera los 500.000 euros. Además, en la primera convocatoria del Plan Extraordinario de Empleo, 900 personas con discapacidad tuvieron un contrato de trabajo.
En este sentido, destaca la puesta en marcha del CREA, el programa de formación dual dirigido a colectivos de difícil inserción laboral. Aunque está dirigido a un abanico más amplio de colectivos, 19 de las 24 entidades que han solicitado proyectos tienen entre sus fines el trabajo con las personas con discapacidad. La convocatoria cuenta con un presupuesto de dos millones de euros y prevé conceder 22 proyectos, para 220 personas.
El 5,3 por ciento de la población en edad de trabajar de Castilla-La Mancha tiene una discapacidad oficialmente reconocida, 79.200 personas, de ellas un 45 por ciento son mujeres, 32.100. Castilla-La Mancha es la tercera Comunidad Autónoma con mayor tasa de actividad de personas con discapacidad, que roza el 38 por ciento, por detrás de la Comunidad de Madrid, 42,8 por ciento, y el País Vasco, con el 39,4 por ciento.
