El secretario de Escuelas Católicas Castilla-La Mancha, Ángel Camuñas, ha indicado que la organización tiene este curso afiliados 88 centros educativos en la región en los que trabajan 3.433 profesores y están escolarizados un total de 45.436 alumnos.
Camuñas, que ha presentado en rueda de prensa los datos de comienzo del curso 2018-2019, ha indicado que ha comenzado con normalidad en la región, han informado Escuelas Católicas en nota de prensa.
Durante su intervención, Camuñas ha reafirmado la vocación de servicio de Escuelas Católicas hacía las familias y hacia la sociedad, “contribuyendo con ello al desarrollo de nuestra comunidad y a mejorar la calidad de nuestro sistema educativo”.
“Desde nuestra institución creemos y defendemos los principios recogidos en nuestra Constitución y en los tratados internacionales que defienden el derecho de los padres, que es sagrado, a educar a sus hijos conforme a sus convicciones propias, y el derecho de la sociedad civil para crear y dirigir centros educativos en los que se pueda desarrollar la tarea educativa conforme a las demandas de los padres”, ha argumentado.
En cuanto al proceso de admisión de alumnos, Camuñas ha señalado que los centros de Escuelas Católicas, inspirados en la persona y la vida de Jesucristo, acogen a todos los alumnos “sin diferencia ni distinción”.
Por ello, una vez más ha reiterado que el proceso de admisión en Castilla-La Mancha es público, es abierto y el sistema deja pocas competencias a los titulares de los centros. “De esta forma, en nuestras aulas acogemos de forma equitativa y conforme a los criterios marcados por la Administración a los alumnos que tienen necesidades educativas especiales”, ha añadido.
El secretario de Escuelas Católicas Castilla-La Mancha no ha querido olvidar señalar algunas incidencias ocurridas en los últimos días del proceso de admisión, sobre todo durante este mes de septiembre.
“Fundados en la experiencia, varios centros nos han indicado que se deberían intentar acortar los plazos en los procesos de admisión a las enseñanzas de Formación Profesional, ya que a menudo concluyen cuando ha pasado más de un mes desde el inicio de curso”, ha explicado.
Camuñas ha mostrado su preocupación ante la “exclusión expresa” de los alumnos de sus centros de algunos programas regulados por la Consejería de Educación. “El último caso ha sido la Orden 133/2018, de 21 de agosto, de la Consejería por la que se regulan las estancias educativas y de inmersión en inglés para alumnado de quinto y sexto curso de Educación Primaria y de primero y segundo de Educación Secundaria Obligatoria y se convoca el procedimiento para la selección de proyectos de inmersión en inglés en el Centro Rural de Innovación Educativa de Cuenca (Criec)”, ha dicho.
El secretario ha señalado que esperan llegar a un acuerdo con la Junta y regular la forma que estas ayudas lleguen también a los alumnos de Escuelas Católicas.
Para finalizar, Camuñas ha querido recordar que las Escuelas Católicas de Castilla-La Mancha son una red de centros educativos, y prestan un servicio público a las familias que así nos lo demandan. “Deseamos manifestar que no somos enemigos de nadie y que nuestro deseo es caminar junto con el resto de la comunidad educativa buscando que nuestro sistema educativo sea más eficaz, contribuya al desarrollo integral de nuestros alumnos”, ha concluido.