En el diseño de este inmueble ha participado de forma activa el arquitecto belmonteño Carlos Julián García, quien ha explicado a Europa Press que en el interior de este gran rascacielos de oficinas ha intervenido en el diseño y ejecución de la iluminación tanto exterior como interior.
En cuanto al observatorio panorámico, ha detallado que se trata de un mirador con forma triangular a más de 345 metros. La terraza exterior está diseñada para que la gente no solo se amontone frente al cristal para disfrutar de las vistas, sino que está ideado como si fuera una plaza, con asientos donde sentarse a disfrutar de las vistas.
Parte del suelo es de cristal para andar sobre los edificios de Nueva York y los cristales están ligeramente inclinados hacia adelante para contemplar el ‘skyline’ no solo hacia el frente, sino también hacia abajo. También cuenta con suelo radiante para combatir las bajas temperaturas de la ciudad.
El mirador está compuesto por un total de 15 paneles independientes encajados como puzzle y suman un peso aproximado de 400 toneladas. La estructura fue construida y ensamblada en Italia, antes de ser desarmada y enviada en barco hacia Nueva York, tal y como explica el arquitecto.
SEIS AÑOS EN NUEVA YORK CON VARIOS PROYECTOS
Carlos Julián García llegó hace seis años a Nueva York, y tras “años muy duros”, ahora trabaja con cinco personas a su cargo en proyectos tanto en el país norteamericano como en Europa.
Se especializó en diseños relacionados con la luz, algo que recuerda es “fundamental en el día a día” de las personas. “Es sinónimo de vida, es algo primario para el ser humano, ya que controla nuestro ciclo circadiano. La luz es el recurso que exalta y da emoción a la forma. Es la que modela a través de las sombras proyectadas, la que enmarca la belleza del color y las formas”, asevera.
Hudson Yards, el barrio donde se enmarca este nuevo proyecto a estrenar este miércoles, es un nuevo barrio construido desde cero en el centro de Manhattan y que cuenta con mas de 15 nuevos rascacielos.
García compara este ensanche a la ampliación de Chamartín en Madrid, toda vez que los nuevos edificios están proyectados encima de las vías y las cocheras del tren.
Más de 20.000 apartamentos, un centro cultural, hoteles y una plaza central donde los árboles tienen aire acondicionado en las raíces debido al calor que producen los trenes que van por debajo son algunas de las características de este vecindario.
En su estudio también se ha diseñado, con su participación, la iluminación exterior de los edificios de la primera fase y algunas torres, así como la plaza y el nuevo proyecto del arquitecto Thomas Heatherwick, el llamado Vessel.
Junto al Heatherwick Studio ha desarrollado el concepto de iluminación para el Hudson Yards Vessel, la pieza central de la plaza en Hudson Yards. Se trata de un monumento interactivo formado por 2.500 escalones y 80 descansillos. Inspirado en los templos indios, está construido de acero con revestimiento de acero pulido color cobre. Costó 200 millones de dólares y actualmente está inmerso en plena competición para poner nombre.
Junto con su equipo, también ha trabajado en la nueva línea de cruceros de Virgin Voyages, destinados solo para adultos. Construido por los astilleros italianos Fincantieri (Genova), el barco tiene una capacidad para 2.770 pasajeros y 278 metros de eslora.
“Diseñamos tanto iluminación exterior como interior, y fuecomo hacer más de 17 proyectos en uno. Durante el proceso de construcción también nos contrataron para diseñar la iluminación de su club de playa en Bimini, en las Islas Bahamas”, recuerda el arquitecto belmonteño.
