El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha considerado que el documento de la nueva Estrategia Nacional de Gestión Cinegética que presentará este lunes a las comunidades autónomas en conferencia sectorial es “un paso adelante” para la ordenación de un modelo de caza “sostenible” y ha defendido el “amplio consenso” que, ha dicho, ha generado dicho documento durante su elaboración.
En una entrevista con CMMedia recogida por Europa Press, Planas ha destacado que un acuerdo como este “no cae del cielo” y requiere de “muchas horas de conversación”, pero se ha mostrado “muy contento” por el documento que irá a la conferencia sectorial, esperando que este también consenso también se dé entre las comunidades autónomas y, sobre todo, “que oriente bien el futuro del mundo cinegético en España”.
El ministro ha comentado que el texto ha contado con 7.100 alegaciones, siendo probablemente el documento de su ministerio que mayor número de aportaciones ha recibido en los últimos años, algo que demuestra, ah dicho, “el interés de la sociedad en el mundo de la caza”. “Hay todo tipo de alegaciones, algunas son muy favorables y otras son críticas, pero una gran mayoría añaden aspectos que hemos intentado integrar, no solo desde el punto de vista de la redacción sino del enfoque”, ha precisado.
Asimismo, se ha mostrado positivo respecto al grado de acuerdo que puede concitar la Estrategia en las comunidades autónomas ya que, ha detallado, ya hubo una comisión preparatoria de esta conferencia sectorial en la que hubo unanimidad entre todas las regiones en su apoyo al documento.
De igual modo, ha precisado que hay que tener en cuenta que esta Estrategia, que entraría en funcionamiento inmediatamente si se apruebe este lunes en conferencia sectorial, contiene únicamente recomendaciones “que tienen que ser concretadas por las comunidades autónomas, que son quienes tienen competencia en materia de caza”.
En cualquier caso, ha asegurado que el objetivo es “desarrollar una caza que sea sostenible y permita la continuidad y la preservación de especies y hábitats”, sin descuidar que continúe siendo una “actividad de ingresos importante” para el mundo rural y que respete su significación social, integrando a la caza “en el siglo XXI” haciendo que respete los objetivos de desarrollo sostenible.
Esto se debe lograr, según el ministro, con el fomento de la sostenibilidad en la actividad cinegética, sin “esquilmar” especies ni hábitats, algo que la Estrategia pretende dando directrices para que “cada uno de los actores y, en particular, las comunidades autónomas tengan una visión general del tratamiento en España y puedan ajustar sus planes a los planes nacionales”, algo que, ha apostillado, el mundo de la caza venía pidiendo “reiteradamente”.
De igual modo, ha incidido en la necesidad de que haya participación y el mundo de la caza “se sienta concernido” y también de que se renueve la “imagen social” de la caza.
