El protocolo de manejo de pacientes con infección activa por SARS-CoV-2 ha ido introduciendo cambios a lo largo de la pandemia, para adaptarse a los escenarios de las nuevas variantes, como el actual con la prevalencia de la contagiosa cepa Ómicron.
La vocal de Atención Primaria Urbana del Colegio de Médicos de Ciudad Real, María del Mar Martínez, comenta las últimas novedades de la estrategia para este nivel.
Las personas que son positivas en Covid han de realizar aislamiento domiciliario durante siete días, sin necesidad, a su término, de realizar ninguna prueba para reincorporarse a su actividad diaria o laboral, salvo que “empeoren los síntomas o tengan dificultad para respirar”. Entonces “tendrán que acudir al hospital”, señala.
Cuando se trata personas con algunos síntomas de virus respiratorio pero que son negativos en Covid-19, “hay que limitar las actividades sociales, mantener las medidas de distanciamiento, evitar centros comerciales y lugares con concentración de personas”. En estos casos, los cuadros pueden “ser por otras causas”, indica la también vocal a nivel nacional de Atención Primaria Urbana, que trabaja en el centro de salud número 2 de Ciudad Real (Torreón), quien reitera la necesidad de aplicar medidas genéricas de protección, como limitar la actividad social, realizar lavados de manos y usar de manera habitual la mascarilla.
Estas pautas también son las que han de seguir las personas que han sido contacto estrecho de un positivo y están vacunadas correctamente, mientras quienes no tengan todas las pautas completadas, han de realizar una cuarentena de siete días y vigilar los síntomas que vayan apareciendo.
Cuando una persona es positiva en coronavirus y es asintomática, tendrá que mantener el aislamiento siete días también desde la toma de la muestra para el diagnóstico.
Esta estrategia está siendo revisada por las autoridades sanitarias en función de la situación epidemiológica, y los conocimientos que van teniendo de la enfermedad.