Ciudad enclavada en una de las zonas más afectadas por el Covid-19 de toda la región y con uno de los hospitales que ha estado y está en la primera línea de lucha contra el virus, Alcázar de San Juan empieza a ver la luz después de unos meses muy duros. La alcaldesa destaca que ha sido un tiempo “complicado”, pero celebra que los vecinos han tenido un comportamiento “ejemplar”.
Rosa Melchor afirma que “Alcázar es una ciudad acogedora, generosa y solidaria, y cuando mayor es la adversidad mejor responde”. Sus palabras están llenas de agradecimiento para los profesionales sanitarios que han plantado cara a la pandemia desde el Hospital General Mancha Centro, pero no solo para ellos.
Empresas, asociaciones, instituciones y particulares han estado implicados en la “avalancha de solidaridad”. La primera edil describe que todo ha sido poco para ayudar a los enfermos, para arropar a los que han perdido seres queridos, para evitar que hubiera más contagios y para recibir a los sanitarios que llegaron de refuerzo a la ciudad.
“Desde hace semanas los fallecidos por Covid dejaron de ser cifras para convertirse en caras, en historias cercanas, en familia, en amigos, en vecinos y vecinas”, destaca Rosa Melchor. Alcázar “tiene la suerte de contar con un hospital desde hace 25 años”, que atiende a ciudadanos de 35 municipios, que agrupan casi 200.000 personas, en una de las zonas con mayor densidad de población de toda la región.
Esa alta densidad, junto a la elevada interactuación “laboral, social e incluso sentimental” en la comarca, aparte de las buenas comunicaciones con el resto de la península, con Madrid, el Levante y Andalucía, pueden estar detrás del elevado número de contagios de la zona. Sin especular, Melchor espera los resultados del estudio que realiza el Instituto de Salud Carlos III de Madrid sobre la cepa que ha afectado a la zona.
La lucha del Ayuntamiento contra el Covid
Desde el principio, el Ayuntamiento ha estado implicado en mitigar los efectos de la pandemia, “todo lo que estaba a nuestro alcance”. Ha garantizado el funcionamiento de los comedores escolares, ha aprobado una línea de subvenciones para que los autónomos paguen la mitad del IBI del local donde desarrollan su actividad y ha convertido la tasa de terrazas en “cuota cero” para este verano.
Además de la desinfección de vías públicas, el seguimiento de las residencias y de seguir con la ayuda a domicilio, el Ayuntamiento ha dado respuesta a las necesidades de las familias vulnerables “en 24 horas” y ha garantizado el alojamiento a los sanitarios que el Sescam contrató para que trabajarán en el hospital. Las medidas han estado dirigidas a dar respuesta a las necesidades de los vecinos y a frenar los efectos de la crisis económica para “no dejar a nadie atrás”.
El camino a la “nueva normalidad”
La provincia entró hace dos semanas en Fase 1 y Alcázar ha empezado a recuperar poco a poco servicios, como la actividad en el punto limpio, las instalaciones deportivas y el mercadillo –en formato reducido-. La apertura de las terrazas de los bares y del pequeño comercio ha permitido que la ciudad recobre “parte del buen ambiente habitual”.
El camino hacia la “nueva normalidad”, en palabras de Melchor, tiene que ser “unidos, juntos, sabiendo que en este momento nuestra única ideología, la de todos, debe ser Alcázar”. La primera edil da las gracias al vecindario, porque este lunes 1 de junio entrarán en Fase 2 “gracias al esfuerzo colectivo”. Ahora anima a disfrutar de la nueva etapa, “con respeto, prudencia y responsabilidad”.
El Equipo de Gobierno ya tiene marcadas sus principales líneas de actuación y la alcaldesa asegura que van a ser “la apuesta por el comercio, la hostelería, el turismo, la industria agroalimentaria, las energías renovables y el transporte logístico”.
Este “bicho” ha cambiado las fechas, ha supuesto un “dramático paréntesis”, pero destaca Rosa Melchor que “no cambiará nuestros objetivos de avance y prosperidad para Alcázar de San Juan”. Rosa Melchor afronta con fuerza el futuro, después de tener que aparcar durante semanas el “dolor” para responder a las “necesidades inmediatas”.
No desearía que ningún otro gobernante, “fuese del partido que fuese”, tuviera que afrontar una crisis semejante. Por ello, la socialista critica la actitud de algunos líderes que han aprovechado para responsabilizar “de las consecuencias de esta pandemia mundial a los distintos gobiernos”.
“Un día de unidad”
Para la alcaldesa de Alcázar de San Juan, el Día de Castilla-La Mancha tiene que ser “un día de unidad”, la misma que “han demostrado los castellano-manchegos para frenar el contagio del virus”. Por eso, considera que los representantes públicos y las instituciones tienen que ser “canalizadores de ese esfuerzo que todos juntos hemos hecho para salir de esta crisis sanitaria”.
Este 31 de mayo tiene que ser, en palabras de Rosa Melchor, un día para despedir a las víctimas mortales del coronavirus, de reconocimiento a todos los profesionales que han luchado contra la pandemia y una jornada para hacer “un llamamiento a la esperanza en un buen futuro para Castilla-La Mancha”.