Actualmente la Atención Primaria de Castilla-La Mancha goza del mayor poder resolutivo de su historia, fruto de las inversiones del Gobierno que preside Emiliano García-Page, en recursos humanos, tecnología y estructuras.
Así lo ha dado a conocer el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, en un debate celebrado en las Cortes regionales en el que ha recordado cómo el actual Gobierno ha incrementado de forma progresiva el presupuesto que destina a la Atención Primaria, llegando al 20,9 por ciento este año y con el horizonte de alcanzar el 25 por ciento.
“Este esfuerzo presupuestario en Primaria se plasma en el incremento de recursos humanos, lo que nos permite, entre otras cosas, reducir las ratios de pacientes por profesionales en este nivel asistencial”, ha afirmado el consejero.
En este sentido, ha explicado que Castilla-La Mancha está entre las seis comunidades autónomas que están por debajo del número de pacientes recomendado por las Sociedades Científicas para cada médico de familia, establecido en 1.500.
En concreto, en Castilla-La Mancha esta ratio está actualmente en 1.347 tarjetas sanitarias por médico de familia. Hay gerencias, como la de Cuenca, en la que la media está en 847 tarjetas sanitarias por médico de familia.
En el ámbito de las sustituciones en este nivel asistencial, el consejero ha explicado que en 2017 y 2018, el Gobierno de Emiliano García-Page invirtió en Atención Primaria 24 millones de euros en nombramientos de sustitución, lo que supuso un incremento del 16,82 por ciento y de 3,5 millones de euros respecto al año 2016 y de nada menos que un 73 por ciento y 10,1 millones más de incremento respecto a 2013.
“No olvidemos el esfuerzo que se está haciendo para consolidar el empleo de los profesionales de Atención Primaria”, ha afirmado Fernández Sanz. Así, en las Ofertas Públicas de Empleo de 2016, 2017 y 2018 se han incluido 306 plazas de Medicina de Familia y cerca de 100 plazas de Pediatría de Atención Primaria.
Formación
Por ello, ha destacado que el Gobierno de Castilla-La Mancha ha incrementado un 57 por ciento las plazas ofertadas de residentes de Medicina Familiar y Comunitaria, recordando que “no olvidemos que el PP sometió a esta especialidad al mayor desplome de la historia en cuanto al número de plazas de residentes ofertadas, dejándolas en 47, poco más del 50 por ciento de las plazas acreditadas para Castilla-La Mancha”.
Si se tiene en cuenta que el periodo de formación de estos especialistas es de cuatro años, el resultado es lo vivido este año con la graduación de médicos de familia en Castilla-La Mancha más baja de toda la historia.
En respuesta a esta situación, desde el Gobierno regional se está ofertando el cien por cien de las plazas acreditadas de Medicina Familiar y Comunitaria con el fin de formar a más especialistas para hacer frente al déficit de profesionales que existe en el conjunto del país.
Fernández Sanz ha afirmado que a día de hoy, “en Castilla-La Mancha tenemos más médicos de Atención Primaria, 2.435, con más recursos a su disposición y realizando menos consultas, lo que permite a estos profesionales dedicar más tiempo a otras actividades que, sin duda, incrementan la capacidad de resolución de este nivel asistencial”.
En relación a la actividad desarrollada en Primaria, ha informado que en el año 2014 se registraron 11.308.000 consultas, cifra que se redujo a 10,7 millones de consultas en el año 2018, es decir 600.000 consultas menos. En esta reducción tiene mucho que ver la puesta en marcha de la receta electrónica y la receta interoperable del Sistema Nacional de Salud. Con esta reducción en el número de consultas, actualmente la media de pacientes diarios de un médico de familia se vería reducida de los 32 actuales frente a los 38 de hace cuatro años.
Del total de 142.000 pacientes que se atienden diariamente en todos los centros del SESCAM, son 49.626 las consultas de medicina de familia, 34.414 las consultas de Enfermería y 6.142 las de Pediatría.
