El cierre supondrá la destrucción de 158 puestos de trabajo directos y otros 40 indirectos, con el consiguiente impacto económico y social sobre el conjunto de La Manchuela conquense por la pérdida de tejido industrial, actividad económica y oportunidades laborales, ha informado CCOO en nota de prensa.
Ante esta perspectiva, los sindicatos han comenzado ya a reunirse con las administraciones implicadas para comenzar a diseñar estrategias de futuro y a plantear medidas encaminadas a propiciar la implantación de nuevas empresas; conjugadas con ofertas formativas y planes de empleo específicos para la comarca.
A la reunión han asistido la delegada de la Junta en Cuenca, María Ángeles Martínez; el vicepresidente de la Diputación y alcalde de Campillo de Altobuey Francisco López; el alcalde de Iniesta, José Luis Merino; el secretario general de CCOO-Industria de Cuenca, Pedro Lucas; el presidente de FICA-UGT CLM, Carlos Duque, el secretario de Política Industria de CCOO-Industria CLM, Juan Cuevas, y los representantes de los trabajadores de Florette-Iniesta Marisa Merino y Miguel Hernández de Fez.